Bugatti terminó con la producción del Divo después de haber hecho entrega de la unidad 40. Así se dio por finalizada la fabricación de esta “obra maestra de la artesanía automotriz”.

El año pasado, Bugatti comenzó a hacer entrega de las primeras unidades del Divo, un deportivo basado en el Chiron y del cual sólo se fabricarán 40 unidades. La última en salir de la fábrica gala se dio hace pocos días y también su dueño ya la recibió. De esta manera, se terminó con la producción de este vehículo que fue catalogado como una “obra maestra de la artesanía automotriz”.

Bugatti despidió al Divo con la entrega de la última unidad fabricada

Aunque se presentó públicamente en Pebble Beach en 2018, previamente fue mostrado en un evento privado al que solo tuvieron acceso 40 clientes del Bugatti Chiron especialmente seleccionados.

Todos se comprometieron a encargar el suyo: “las 40 unidades se vendieron en cuestión de semanas después de aquella primera cita con los clientes”, recuerda Hendrik Malinowski, Director de Ventas y Operaciones de Bugatti. Y eso que cada unidad tiene un precio base de cinco millones de euros.

Bugatti despidió al Divo con la entrega de la última unidad fabricada

Concretamente el último de los Bugatti Divo viste su carrocería en azul brillante EB 110 LM en combinación con elementos en azul oscuro Dark Blue Carbon, que encontramos en las aerodinámicas defensas frontales y posteriores, así como en las aletas laterales, la zona que enmarca el motor trasero o el gigantesco alerón que corona la zaga.

La tonalidad EB 110 LM se inspira en el azul que recubría la carrocería del que fue el último auto oficial de carreras de Bugatti nacido para Le Mans. Ya de por sí, el Divo rinde homenaje a los éxitos cosechados por el fabricante en las carreras, pues fue bautizado así por Albert Divo, uno de los pilotos más laureados de la historia de la marca.

Bugatti despidió al Divo con la entrega de la última unidad fabricada

Volviendo a esta unidad número 40, su conjunto se completa con unas llantas doradas mate y, como otros Divo, luce la bandera francesa en la aleta lateral inferior, tras las ruedas delanteras. Por su parte el interior, también azul y bitono, combina el azul más claro French Racing Blue con el más oscuro Deep Blue, además de con elementos en fibra de carbono vista. Por lo demás la piel y la Alcantara están también presentes.

Bugatti presume que cada una de las 40 unidades del Divo es diferente, ya que la gran mayoría se realizó por encargo. Así, los clientes escogieron tanto los colores de la carrocería y el interior (algunos de ellos únicos), como los materiales del habitáculo. No podía haber sido de otra manera en un coche de estas características y precio.

Bugatti despidió al Divo con la entrega de la última unidad fabricada

Hay que hacer especial mención por ejemplo al Bugatti Divo ‘Lady Bug’: la marca tardó casi dos años en hacerlo realidad. Esta unidad adorna su carrocería con una trama formada por 1.600 diamantes, que tuvieron que diseñarse casi uno a uno para que ninguno quedara deformado en las suntuosas y aerodinámicas formas del hiperdeportivo galo.

Si bien el Bugatti Divo se mueve con idéntica mecánica que el Chiron, el poderoso W16 de 8.0 litros que rinde 1.500 CV y 1.600 Nm, su diseño exterior lo distingue del Chiron convencional y del resto de sus derivados: el Sport, el Pur Sport, el Super Sport

Bugatti despidió al Divo con la entrega de la última unidad fabricada

Así, además de una puesta a punto específica para el chasis (que también es monocasco de fibra de carbono) o las suspensiones, integra en su carrocería, asimismo de este ligero material, elementos aerodinámicos diferenciales.

Por ejemplo el techo está diseñado como si fuera una enorme entrada de aire de tipo NACA o su zaga está coronada por un enorme alerón de 1,83 m ancho, que es un 23 % más grande que el del Chiron. A ellos se suma un capot específico, defensas optimizadas aerodinámicamente y un sinfín de aletas a lo largo y ancho de su fisonomía.

Bugatti despidió al Divo con la entrega de la última unidad fabricada

El Divo también pesa menos que el Chiron: es 35 kilos más ligero gracias a sumar más elementos en fibra de carbono, por ejemplo la tapa del intercooler, además de las llantas específicas. Con este conjunto de añadidos, la carga aerodinámica del Bugatti Divo se incrementa 90 kilos (firma los 465 kg a 380 km/h), y es capaz de soportar fuerzas centrífugas en curvas de hasta 1.6 G.

Pese a que Bugatti presume de que es más rápido en circuito, sobre todo a la hora de tomar las curvas a mayor velocidad, su punta es menor que la del Chiron (420 km/h), pues está limitada a 380 km/h. Esto se debe, entre otros motivos, a que no dispone del modo Top Speed que sí ofrecen sus hermanos.

Bugatti despidió al Divo con la entrega de la última unidad fabricada

Sea como fuere, este exclusivo modelo dejará de salir de las dependencias de Bugatti con el último de los Divo ya entregado a su afortunado propietario. Sus 40 unidades contribuyeron a engrosar las 500 unidades a las que está limitado el Chiron, de las cuáles casi todas ya están vendidas también.