New Driver dialogó con Christian Ledesma para conocer un poco más su intimidad. En la charla aseguró que quiere volver a ser campeón de TC, cómo se perdió el respeto en el deporte y la posibilidad de ser dirigente el día de mañana.

Uno de esos pilotos genuinos, que dice lo que piensa y con una experiencia  que avala cada uno de los conceptos que expone. En un nuevo Instagram Live, New Driver dialogó con Christian Ledesma. Durante la charla, el de Mar del Plata contó sus objetivos deportivos, el respeto dentro del deporte, la posibilidad de tener un cargo importante como dirigente en la ACTC y con quién le gustaría compartir un buen momento para charlar.

¿Con quién te sentarías a tomar un rico café de Havanna?

Con mi viejo. Le quisiera hacer un montón de preguntas. Con mi viejo teníamos mucha diferencia de edad y falleció joven con 71 años. Mi papá era grande y mi hermano me lleva 18 años, después de muchos años me di cuenta que la figura paterna fue mi hermano y la de mi papá la del abuelo. Es lo que siento hoy, después de años. A mi viejo no lo disfruté. Cuando yo empecé a correr, él ya andaba jodido y empezó a tener problemas de salud. Por eso me sentaría a tomar un café con él.

¿Cómo te surgió la idea de querer ser piloto?

Nunca dije que quería ser piloto. Desde chico me gustaba pero no miraba carreras. Sí me gustaba cuando me llevaban a carreras en Balcarce, a Necochea y a alguna que otra. Pero no me desvivía por los autos de carrera. Siempre estuve vinculado al automovilismo porque desde que era chico mi hermano corría de acompañante en las cafeteras. Empecé porque mi hermano se casó y se fue de casa, entonces tuve que empezar a hacer algún deporte. Mi hermano y un amigo decidieron comprarme un karting para estar ocupado porque andaba muy mal en el colegio. Y empecé, se dio pero no por pedido mío. Me impulsó mi hermano seguramente complotado con mi viejo para convencer a mi vieja. Nunca se lo pregunté, creo que lo voy a hacer en la próxima charla.

Dentro de tu trayectoria, ¿Cumpliste todos los objetivos o hay alguno que te queda por cumplir?

Me gustaría poder salir campeón otra vez del Turismo Carretera. Eso me pongo hoy como meta. A veces se complica, lo estamos intentando. No es fácil, siempre tenés un contratiempo. Hay 40 que quieren ganar y 40 que quieren pelear el campeonato, pero hay uno sólo que lo consigue. Ese es el objetivo que tengo, pero también tengo muchos en la vida y en lo deportivo. Algunos los podré llegar a cumplir. Lo importante es sentirse ocupado con objetivos bien altos, aunque pareciesen imposibles. Si no se logran hay que tratar de quedar lo más cerca posible.

Si tuvieses que destacar el día más feliz en el automovilismo, ¿Cuál sería?

La verdad que no lo tengo en claro. Podría decir que el día que salí campeón en el TC o en el TC2000, pero esos no fueron los días más felices de mi vida. Los campeonatos se disfrutan con el venir del tiempo o el pasar de los días. En el TC estuve todo el tiempo analizando mil cosas y no disfrutás el fin de semana. Sí disfrutaría, si el automovilismo se reanuda y es todo igual que antes, el día que esté viajando a la carrera y llegué al autódromo para volver a estar ahí otra vez para escuchar un motor en marcha. Ese sería un día feliz en mi vida. O volver a ir al club con mis hijos.

¿Y cuál fue el día que más te calentaste en el automovilismo?

Tuve varias, como todo el mundo. Algunos lo manifiestan y otros no. La veces que creí que sufrí una injusticia más. O cuando vos vivís una cosa arriba del auto, sabés que actuaste de una forma y te sancionan. Cuando me equivoco lo manifiesto, pero cuando me siento perjudicado teniendo en claro lo que pasó y como actué me caliento mucho.

¿Cómo analizas el tema de los códigos en pista con las nuevas generaciones?

Tuve la suerte de correr con muchas generaciones dentro del TC. Corrí con el Loco Luis (Di Palma) hasta con los chicos de hoy con los que nos llevamos 20 y pico de años de diferencia. Yo debuté de golpe en el TC y corrí con pilotos como Traverso donde no les podías pasar ni cerca y con el Loco Luis que te podías cagar a autazos y se divertía. Cuando te mandabas algunas te llamaban, te hablaban y nadie se enteraba. Antes cuando te mandabas una cagada se golpeaban fuerte y algunos no volvían a la casa.

Hoy lo que pasa es que se perdió mucho el respeto para con el prójimo en la vida y eso se dispara al deporte. Capaz viene un chico que corrió 5 carreras, que va a los pedos y que en algún momento va a ser un referente para reclamarte. A mí no se me ocurría irle a reclamarle a Traverso. Hoy cualquiera se te baja y te reclama a vos, a Ortelli, al Gurí. Cualquiera te dice cualquier barbaridad y se piensa que te puede pasar por arriba. Esas cosas molestan y mucho. Es parte de los cambios de la vida.

Cambiando de tema y yendo al estilo de vida que siempre pregona New Driver, ¿Cuál fue tu primer auto?

Un Fiat 600 mío. Desde muy chico manejaba el auto de mi mamá que era un Fiat 1500 blanco con palanca al suelo, pero el mío fue un 600.

Sos muy meticuloso con la higiene y las cosas del auto de carrera ¿En tu auto para la vida diaria sos igual?

Ya no. Desde que nacieron los chicos es imposible tener los autos limpios. Prefiero, igualmente, que me tiren los papeles adentro y no que lo hagan afuera. Soy de viajar y tiro todo adentro del auto, cuando llego saco todo. Eso antes, cuando era chico no me pasaba. El otro día me acordaba que los sábados empezábamos a lavar el auto el sábado a las 11 de la mañana y era las 7 de la tarde y seguía. Era para ver quien tenía el auto más limpio a la noche y salir a dar una vuelta. Hoy me preguntás si perdería media hora lavando la camioneta y te digo –Ni en pedo-.

Un auto que te guste, que soñarías tener…

Lamborghini me gusta mucho. Pero no sé si lo tendría. Vos me decís que mañana me hago megamillonario por esos golpes de la vida y me preguntás si me compraría un Lamborghini… No sé. Es un auto que me encanta, la estética, la forma, el sonido, pero no sé si lo tendría.

¿Te gustan más los autos o las camionetas para el día a día?

Las camionetas. Tuve auto toda la vida y hace varios años que tengo camioneta. Para las calles y las rutas de Argentina es necesario.

¿Qué auto de gustaría probar?

Un auto de Rally o una Moto GP. Te diría más la moto que el auto de Rally. Me encantaría. Si mañana me decís que me regalás algo, yo te diría –Probar un Moto GP-.

Y la última, ¿Qué querés ser cuando el día de mañana cuelgues el casco? ¿Serías presidente de la ACTC?

Me gustaría. Sería una forma de devolverle al Turismo Carretera todo lo que me dio. Trabajaría, es una responsabilidad sumamente grande. Es algo que no se puede hablar con liviandad. Me gustaría poder trabajar para el automovilismo y fundamentalmente para el Turismo Carretera. Sería lindo seguir vinculado al automovilismo de la parte dirigencial o transmitiendo todo lo que se aprendió para tratar que el automovilismo sea más grande .