En una jornada donde se probaron los protocolos, el autódromo de Buenos Aires reabrió sus puertas después de haber estado cerrado mucho tiempo a causa del aislamiento preventivo.

El autódromo de Buenos Aires volvió a tener ruidos de motores después de mucho tiempo de estar cerrado por causa del aislamiento preventivo que rige en el país. La intención de esta apertura fue probar los protocolos de sanidad para que las distintas categorías estén habilitadas a correr allí. Durante la jornada giraron dos autos del Top Race y uno del Súper TC2000. Además de un Turismo Pista y un Porsche de la monomarca.

El autódromo de Buenos Aires volvió a tener actividad

Le quiero decir a los corredores,  hombres y mujeres maravillosas que compiten, gracias por aguantar. Hoy depende de todos nosotros. Podemos dar este paso con mucha responsabilidad, con mucho sentido común, con mucha racionalidad. Hemos hecho un trabajo muy intenso para poder estar en este momento, cuidémonos, sigamos todos los protocolos”, aseguró Diego Santilli, Vicejefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El autódromo de Buenos Aires volvió a tener actividad

Además de haber dicho estas palabras el mandatario se subió a uno de los autos del Top Race. Los que se hicieron presentes en representación de la “Categoría Espectáculo” fueron Diego Azar y Guido Moggia, ambos manejaron autos del Azar Motorsport. En tanto, Esteban Fernández fue el encargado de manejar el Fiat Cronos del Súper TC2000 alistado por el DTA.

Durante todo el día se llevó a cabo un protocolo muy estricto para que todos los presentes mantengan la distancia y el desplazamiento de todos sea prolijo. Hubo un límite de 16 autos por turno. “Todos los equipos trabajaron dentro de las burbujas y no estuvieron en contacto con el resto de los protagonistas presentes en el “Coliseo Porteño”, que de esta manera volvió a tener ruido de motores”, indicaron desde Campeones, medio especializado que estuvo allí.