El Bugatti Chiron Sport midió todo su potencial mano a mano con un jet de la fuerza aérea francesa en un drag race de 7.227 caballos de fuerza. Una gran producción de la firma gala.

Bugatti decidió repetir lo que había hecho Top Gear hace 14 años atrás cuando enfrentó a un Veyron con uno de los jets de caza más modernos de ese entonces. Esta vez, la firma gala decidió enfrentar al Chiron Sport con el Dassault Rafale Marine de la fuerza aérea francesa. Allí se expusieron los 1500 caballos de potencia de este deportivo con los 5.727 de esta bestia de los aires.

El que realizó esta prueba no fue un Bugatti Chiron Sport convencional, sino que fue una nueva edición especial llamada ‘Les Legendes du Ciel’, limitada a 20 unidades que rinde homenaje a los pilotos de Bugatti que volaron para la Fuerza Aérea Francesa a principios del siglo XX. A los mandos de este ejemplar estuvo el piloto de pruebas Pierre-Henri Raphanel, quien de hecho fue el responsable de romper el récord de velocidad de 431,072 km/h en 2010 con el Veyron 16.4 Super Sport.

A su lado se ubicó el capitán de la Armada francesa Rafale Etienne, encargado de gestionar y domar este caza francés capaz de alcanzar una velocidad de más de Mach 1.6 (equivalente 1.975 km/h) capaz de ensombrecer sus más de 420 km/h de velocidad punta.

Increíble duelo entre el Bugatti Chiron Sport y un Jet de la fuerza aérea

Donde sí gana el Chiron y su motor W16 de 8.0 litros con cuatro turbocompresores, es en el 0 a 100 km/h que puede hacer en solo 2,4 segundos, lo que a priori debería hacer que el vehículo terrestre pueda ganar ventaja en los primeros metros, pero ¿Será suficiente para evitar que el caza, una vez en el aire y a pleno rendimiento le alcance? La propia Bugatti señala además que es una carrera especialmente delicada porque la pista escenario de la prueba es bastante estrecha y corta.

Increíble duelo entre el Bugatti Chiron Sport y un Jet de la fuerza aérea

La respuesta nos la da el mismo Raphanel “Me alejé del Rafale durante los primeros cientos de metros, pero después de unos cientos de metros más, estaba a unos 20 metros por encima ya a mi lado en el aire”, explica. “Una vista increíble y fantástica”. Con todo los organizadores de esta batalla, que no mostró la “photo finish”, declararon la carrera empatada, por lo que ambos terminaron  el encuentro reuniéndose para mostrar dos avanzadas máquinas francesas juntas.