New Driver dialogó con el experimentado diseñador de autos, José Luis Denari, en un nuevo Instagram Live. Allí se habló de la situación actual de la industria, su amor por las cuatro ruedas, sus referentes y mucho más.

Desde hace tiempo que José Luis Denari es un referente dentro de la industria automotriz. El reconocido diseñador de autos tiene una experiencia importante en los medios de comunicación ejerciendo su labor de tester de autos y explicando sus conocimientos carrocerías. New Driver dialogó con él en un nuevo Instagram Live donde habló de la situación actual de la industria automotriz, como comenzó su carrera, los mejores vehículo que manejó y su costumbre de hablarle a los autos que le transmitió a su familia. Una interesante nota donde a continuación de dejamos por escrito lo mejor.

¿Cómo ves a la industria automotriz con el impacto económico del Covid-19?

El problema que tiene la industria automotriz es que no tienen la capacidad de maniobrar. Me llamaron la atención varios datos. Que Rolls-Royce haya hechado 9 mil empleados es una señal terrible. Ese tipo de acciones en un país muy desarrollado como es Inglaterra se toman entiendo lo que está sucediendo y lo que va a suceder con mucha información. Otra de las cosas que recibí de muy mala manera es haber perdido la Amarok y que se vaya a fabricar en la planta de Ford de Sudáfrica. Fue una noticia pésima. Y otra noticia que me golpeó fue la ida parcial de Basf a Brasil. Que se hayan ido allá a hacer sus investigaciones quiere decir que algo mal estamos haciendo.

Más allá del Covid, las decisiones de la Amarok y de Basf se tomaron el año pasado. Lo que está sucediendo es una gran excusa para los políticos. Hace 70 años que se viene haciendo las cosas mal, cada tanto le pegamos una. Faltan políticas a largo plazo. Falta un guiño de la política para la gente, para las industrias y para los que invierten apostando al país. A la industria automotriz le falta ese tipo de señales, de un país en serio. De ver que Argentina tiene la capacidad exportadora. También los impuestos del 55% para comprar un auto nuevo. El problema de Argentina es que sistemáticamente la tira afuera y le echa la culpa a terceros.

Uno tiene que tener un plan a largo plazo. No hay país en el mundo que se sostenga sin planes a largo plazo. No importa si el que viene no es de tu partido político. Vos tenés que lograr un acuerdo intrapartidario donde vos sepas que hay un plan país como hicieron los chinos, que tiene casi 100 años. Sin planes a largo plazo no existe un país. Está faltando eso. Somos uno de los 40 paises que fabrican autos en el mundo, pero si seguimos así dentro de 5 o 10 años vamos a pasar del lado de los que no producen.

¿Qué análisis haces de las cancelaciones de los Salones del Automóvil de este año y del 2021?

Lo que hizo el Covid fue acelerar la digitalización. Las empresas se dieron cuenta de que había costos que no podían tener. Estar en un Salón del Automóvil en Frankfurt para Mercedes Benz, que tiene un mega stand, estás hablando de 25 0 30 millones dólares. Con esa plata pueden hacer la comunicación de todo el año con las redes sociales. Lo que está pasando es eso y también históricamente se pasaron de vivos.

Los franceses que hace los Salones siempre tuvieron costos altísimos. Yo fue expositor y a mí me costaba, por día, 20 mil pesos de hoy tener internet. Son todos abusos que se fueron dando, la industria los fue pagando. Lo que va a pasar ahora es lo mismo que estamos viendo, es la digitalización de la industria automotriz, de nosotros. Todos vamos a tener que entender cómo nos tenemos que reinventar.

¿Cómo nace tu amor por los autos?

Siempre me llamó la atención de chiquito la cuestión de poder moverse con algo que te llevara y me llamaban mucho la atención los autos. Quizás yo me olvidaba de tu nombre pero no de tu auto. Yo sabía los autos de todos. Después, yo dibujaba porque era chico de departamento. Dibujaba mucho Mercedes Benz, me llamaba mucho la atención la parrilla. Después me gustaba mucho el Datsun 280, me gustaba la forma.

Después tuve una computadora con un lápiz óptico con el que dibujaba. Empecé a estudiar ingeniería y hacía un curso de dibujo. Al tiempo hizo un curso de diseños de auto de competición. Siempre me atrajo mucho la forma del auto y me sorprende la parte aerodinámica. Por eso deje ingeniería y me fui a Italia a estudiar diseño de auto.

Pudiste combinar tu gusto por los autos con el gusto de dibujar y hacerlo tu medio de trabajo…

A mí me gusta mucho lo técnico mezclado con lo creativo. Estaba en la parte de ingeniería pero me faltaba toda la parte creativa. La ingeniería desde que Newton hizo las leyes es todo lo mismo y no podés innovar. A los diseñadores nos odian adentro de las empresas automotrices porque siempre le vas a romper el esquema. Son pocos los diseñadores que pudieron romper ese esquema. Yo sigo siendo un apasionado de lo técnico que me encanta también. No es que lo mío sólo es el arte.

¿Cuáles son tus diseñadores favoritos a nivel mundial y por qué?

No voy a empezar por un estilista sino que voy a empezar con Ferdinand Porsche. Para mí es el número 1 de la historia. Logró conjugar la ingeniería con la faceta creativa que tiene que tener el diseño. Era un técnico brillante pero era un tipo muy creativo y que le llamaba la atención todo. Después me voy a lugar más desde el carrocero. Para mí Giorgetto Giugiaro, el dueño de italdesing es un capo. Es un tipo que logró conjugar el arte, porque estudio bellas artes, con el área técnica. Por eso junto a su socio que era técnico lograron tener un centro de diseño de 1000 empleados. Le gusta mucho el diseño industrial y no tanto el estilo. Su auto preferido es el Fiat Panda, por ejemplo.

A Horacio Pagani no lo pongo en ese listado porque todavía le queda tela, pero es un tipo fanático de Miguel Ángel, de Da Vinci. Entonces conjuga todo lo técnico con todo lo artístico. Si hubiese nacido en la época del 20 o el 30 hubiese sido un Ferdinand Porsche o similar. Tiene la humildad para hacer, la capacidad. Al que si pongo en la lista es a Pininfarina. Hizo 600/700 autos y 80 Ferraris. Más allá de los trabajos que hicieron otros, él logra la estética y las proporciones perfectas. Eso no es fácil. La vida y la belleza es una cuestión de proporciones.

Por eso yo me enganche con el mundo de los autos es porque a mi me gustan las cosas lindas. Hay autos que me quedo en los salones, cuando están en las plataformas giratorias, mirándolo 15 o 20 minutos. Trato de verlo, de desmenuzarlo y ver qué es lo que quiso hacer el diseñador. Te vas enamorando.

¿Para qué te enamore un auto a vos te tiene que llamar por su estética?

Para mí es la conjunción de la técnica con la estética. No me enamora sólo lo estético y tampoco me enamora solo lo técnico. Cuando en un auto lográs encontrar todo eso es donde encontrás ese éxtasis. Un Mercedes 300 SL no tiene aristas. El chasis es perfecto, el motor es una maravilla, no podes no enamorarte. No podes no quedarte fascinado con un Jaguar E-Type. Son cosas excelsas. A mí hasta me emociona cuando ves a ese tipo de autos pasar. Más si tiene un lindo ruido, porque también hay que diseñar toda la parte sensorial.

¿Te pasó de subirte a un auto y sentir ganas de llorar de la emoción?

Me pasó muchas veces de tener nudos en el estómago. Cuando prendí por primera vez la Ferrari 430, que probé en Maranello, yo no lo podía creer. Cuando prendés una Ferrari con un V8 bien agudo y la sentís no podés no emocionarte. Dentro de mis autos, a todos los que tuvo y también motos, yo les hablo. Cuando nos vamos de viaje y llegamos con mi familia le digo a mis hijos que le agradezcan y le toquen el tablero al auto. Eso es algo que yo lo hago desde muy chico. Estoy totalmente convencido que si vos le hablás y entablas ese vínculo hay algo, te trata mucho mejor.

Te digo al más, los autos italianos, a pesar de que son un dolor de cabeza en muchos casos, tienen otra vida, tienen otra cosa, no es un Corolla. El Corolla está más muerto. Los japoneses no logran darle la mística. Aunque tengo una profunda admiración por la cultura japonesa, si querés confiabilidad comprá japonés. Por eso tengo una Toyota Prado.

¿Cuál es el mejor auto de la historia por mecánica y diseño?

Es muy difícil. Cada segmento tiene su figurita exitosa. Si tuviera que elegir uno, claramente, sería un Porsche. Te da la confiabilidad de los japoneses. Los Porsche no se rompen. No sé si sería un 911, por ahí sería algo más barato como un Cayman. Si tengo que elegir un auto quiero un auto inteligente, quiero un auto que no se rompa, quiero que me guste, que tenga historia, quiero todo eso y creo que me lo puede llegar a dar un Cayman un Boxter primera generación.

¿Cómo es el proceso de diseño de un auto?

El primer día tirás estre 30 y 50 bocetos para ir buscando. No es libre, tenés que responde a un paquete técnico, el piso, las torretas de suspensión, el volante, la base del parabrisas, tenés un poco como se conforma el habitáculo, las partes duras. Ahí arriba vas construyendo tu idea con ciertos parámetros. La seguridad no es un tema menor. Hoy se ven los autos muy inflados y son por las nuevas normativas de seguridad. Por eso muchos autos son iguales. Y también tenés exigencias con el tema costos. El proceso creativo puede durar 3 meses.

¿Cuál es el objetivo de los Concept Cars que muchas veces no terminan de llegar al mercado?

Lo define un poco la palabra. Lo que vos presentás es una idea, un concepto, es algo que vos tanteas para ver si al mercado le gusta o no. Después tenes concept car que son muy delirados y otros que no. En algunos están tanteando una tecnología en particular y querés escuchar lo que dice la gente.

¿Cambian los diseños con la tecnología eléctrica?

La diferencia principal es donde ubicás el paquete de baterías. El paquete de baterías en un auto urbano lo ponés en el piso y no pasa nada. En un superdeportivo, como puede ser el Battista, si lo ponés en el piso subís el punto del piloto y el rolido del auto. Entonces en ese auto pusieron en la parte central todo el paquete de baterías y tanto el conductor como el acompañante se sientan en ellas. Todo hecho en fibra de carbono para bajarle el centro de gravedad. Después te cambia bastante el diseño al no tener el block. El tercer punto que cambia es la carrocería porque lo que cambia sustancialmente es la respiración. La parte térmica en un auto eléctrico desaparece. Hay algunas cosas que refrigerar pero se está lejos de lo que se tiene que hacer con otro tipo de autos. Por ende, la carrocería no está tan agujereada.

¿Cuál fue el mejor autos que manejaste y en el lugar ideal?

Fue una locura lo que me pasó con el Aston Martin Twenty Twenty. Me lo llevé todo el día y como estaba medio fresco me dieron un sweater beige que decía “Aston Martin Twenty Twenty”, una gorra y antejos negros. Agarro todo el equipo, me subo al auto, lo prendo y cuando lo hago salta el tema típico de James Bond… me sentía Bondo (Risas). Me fui todo el día con ese auto a las colinas de Torino a hacer una nota. Fue muy loco.

Y otra fue cuando viaje una vez a Europa y le quería hacer una nota a Pagani. Hablo con él y me dice que vaya a Montecarlo porque iba a estar ahí. Alquile un Alfa Romeo GT y me fui para allá. Llegó al club Pagani y frenan los dos primeros Zonda que habían llegado. Uno era Jorge Gómez y otro un amigo de él. Me preguntaron que me parecía el auto y les dije que no los había manejado, Horacio siempre me llevaba pero no me lo largaba.Entonces, Jorge saca la llave del bolsillo y me dice “Llevatelo”. Estabamos a cinco cuadras del circuito de Mónaco. Entonces salta el amigo y me dice “Llevate el mío que está adelante”. Cuestión es que me lleve el auto de Jorge (Risas).

Del Zonda me sorprendió que es muy Mercedes Benz en el concepto. Manejé muchos AMG de distinta índole. Son autos y cajas que te permiten un uso citadino. Es un auto que va dormido y lo podés llevar sin ningún problema. Cuando lo acelerás es una dinamita. Está muy bien hecho, muy bien concebido.