Con una esencia bien vintage tanto en su parte exterior como interior, este McLaren 720S se viste con un color verde icónico gracias al trabajo de Carlex Design.
Si hay una empresa que intenta darle un toque distintivo a los autos a su propia manera esa es Carlex Desing. Esta compañía hizo en varias ocasiones trabajos para no saber de qué marca era el vehículo o toque sutiles para que un coche todavía sea más exclusivo. Uno de estos últimos es que se decidió agarrar un McLaren 720S y darle una impronta más vintage tomando un verde llamado British Racing Green en su pintura que hace que este deportivo resalte aún más. También hay detalles en su interior que se destacan.
Es precisamente ese British Racing Green que forma parte incluso del nombre de la edición especial el verdadero protagonista del producto. Como se puede apreciar esta pintura no luce de cualquier forma, sino que este verde oscuro brillante está pintado totalmente a mano, mostrando los trazos del pincel. Un toque sutil pero lo suficientemente especial como para marcar la diferencia con otros 720S sin resultar estridente.
Este acabado se acompaña en el exterior de unas nuevas llantas de aleación de 19 pulgadas delante y 20 detrás con un diseño especial y un acabado gris grafito, calzadas en unos neumáticos Pirelli.
Pero si su exterior ya consigue sorprender, su interior no iba a ser menos. A juego con el verde clásico del exterior encontramos en la cabina una tapicería de color marrón de la más alta calidad hecha en cuero y Alcántara que cubren prácticamente todo el interior, incluso en el volante, y con ciertos detalles en color blanco a modo de contraste junto con los elementos en aluminio de la consola central y las puertas. La fórmula con este color marrón además de ser el contraste perfecto para el verde del exterior aporta una elegancia al deportivo y moderno interior del 720S que evoca a los coches deportivos clásicos.
Mecánicamente no hay cambios, por lo que se mantiene el famoso motor V8 de 4.0 litros biturbo con 720 CV de potencia y 770 Nm de par máximo. En total todo este trabajo de pura artesanía da como resultado un precio extra de 65.000 euros, que se suman a los 284.700 euros que cuesta adquirir con un 720S.