Ora, la empresa china que es parte del grupo Great Wall Motors, presentó en el Salón del Automóvil de Pekín un vehículo con aspecto retro pero que es impulsado por un motor eléctrico de 700 kilómetros de autonomía.
Ora, una marcha china, revoluciono el Salón de Pekín al presentar el Futurist, un sedán que tiene un diseño bien retro pero que su impulsión es eléctrica. El vehículo de esta firma, que pertenece al grupo Great Wall Motors, tiene un aspecto muy parecido al de un Ford Mustang de la década del 60 en su frontal y en su interior cuenta con una motorización que le permiten recorrer 700 kilómetros con una sola carga.
Los grupos ópticos están escoltados por una falsa parilla cercada por un embellecedor cromado y, bajo la misma, encontramos una barra también plateada que cruza todo el frontal a lo ancho como ocurría en el propio Ford Mustang de primera generación, aquel modelo de la década de los 60 y parte de los 70.
Sobre dicha inserción se sustentan dos pequeños faros circulares de luz diurna en otro claro guiño a los clásicos. En el lateral resaltan unos tiradores en las puertas y la configuración de estas, pues las traseras son de apertura inversa. Además, las puertas carecen de marco y no existe pilar B. Sus líneas tensas se mantienen a lo largo de todo el coche hasta la zaga, incluso en el portón del baúl, bajo el cual siguen predominando los embellecedores cromados en el parachoques y los bajos.
Asimismo, en el interior se mantiene la mezcla de elementos tradicionales, como el volante de tres radios con un delgado aro interior en el centro o las bocas de ventilación emulando los clásicos relojes sobre el tablero, con elementos actuales, como la pantalla digital para el sistema de infoentretenimiento o la consola central flotante.
Respecto a los datos técnicos, el ORA Futurist se sustenta sobre la plataforma Lemon de Great Wall Motors, que puede albergar motores térmicos, eléctricos, híbridos enchufables y de pila de combustible de hidrógeno, según Car News China.
En este caso, el concept presentado representa la versión eléctrica, dotada de baterías sin cobalto y con una autonomía de 700 kilómetros (435 millas), aunque no se especifica bajo qué ciclo de homologación.
Por el momento, el nuevo coche eléctrico de Great Wall Motors fue dado a conocer como un mero prototipo, pero sin duda habrá que seguirle la pista próximamente. En Europa, el Honda e ya recuperó el espíritu retro en un coche cero emisiones, el próximo fabricante en sumarse a esta moda podría ser ORA con este prometedor modelo.