El gobierno anticipó que pagará en tres cuotas el aguinaldo de los trabajadores estatales que cobran salarios superiores a los 80.000 pesos. Los gremios rechazaron la medida.

En el mes de julio, los trabajadores estatales suelen percibir la primer parte del aguinaldo (sueldo anual complementario). Sin embargo, debido a la situación económica que atraviesa el país a causa de la pandemia de coronavirus, el gobierno anticipó a los dirigentes gremiales que quienes cobren salarios brutos de hasta 80.000 pesos cobrarán el medio aguinaldo de junio en un solo tramo, pero quienes cobren por encima de esa cifra recibirán 40.000 pesos y el resto en dos cuotas, en los meses de julio y agosto. Se estima que un 65% de los trabajadores estatales percibirá su aguinaldo completo y el resto, fraccionado.

La decisión todavía no fue oficializada por la Casa Rosada, pero fue anticipada el viernes pasado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, al titular de UPCN, Andrés Rodríguez, y al jefe de ATE, Hugo “Cachorro” Godoy. “No tenemos plata”, sintetizó el funcionario. De todas formas, mañana habrá reunión del gabinete socioeconómico en la Casa de Gobierno y se espera que el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, explique los detalles sobre el pago del aguinaldo al sector público.

Godoy, titular de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), aseguró no estar de acuerdo con la medida. “Nos responden con esta medida cuando estamos poniendo el cuerpo en medio de la emergencia con los trabajadores esenciales en salud, seguridad, energía y otros sectores, y para hacer esto utilizan los mismos argumentos que habían usado para postergar el aumento salarial. Es un retroceso como lo fueron los cuatro años de Macri”, disparó.

Rodríguez, de la Unión Del Personal Civil De La Nación (UPCN), por su parte, calificó la medida oficial de “una locura” y aseguró haberle solicitado a Cafiero que revisara lo resuelto. Además, anticipó que en la UPCN se analizarán los pasos a seguir y que se difundirá en las próximas horas una dura declaración sobre el asunto.

Se espera que la decisión del Gobierno tenga un efecto “cascada” en las provincias y los municipios, que están haciendo malabares con sus finanzas para pagar los sueldos. Mendoza fue la primer provincia que anunció que pagará el aguinaldo en forma escalonada: el gobernador Rodolfo Suárez acordó con los 18 intendentes un cronograma de pagos entre los meses de septiembre y diciembre, priorizando los salarios más bajos.

Hace quince días, el Gobierno les comunicó a los sindicatos estatales que “por el momento” no habrá ningún incremento salarial para los trabajadores del sector público y que solamente podrán renegociarse cláusulas del convenio que no tengan impacto en los sueldos, como algunas licencias. Ante esta decisión, motivada por la pandemia y las negociaciones sobre la deuda, la UPCN exigió una “urgente recomposición salarial” y advirtió que “los trabajadores públicos no somos ni debemos ser la variable de ajuste”.

Hace una semana, tras la reunión del gabinete socioeconómico, el ministro Moroni había asegurado que el Gobierno “no está pensando en nada que signifique prorrogar o diferir” el pago del medio aguinaldo de junio y destacó que “la norma es la que está vigente”.