Le ganaba muy bien a Talleres 2 a 0 y faltando 10 minutos se lo empataron. Figal, con el último suspiro, metió el gol de la victoria.

A veces se dan partidos así. Independiente venía de ganar otros partidos sin jugar bien. Talleres llegaba al Libertadores de América con la posibilidad de alcanzar la punta del torneo. Sin embargo el Rojo superó claramente a un rival que juega muy bien como Talleres durante 75 minutos, le iba ganando 2 a 0 con un gol de Cecilio Domínguez a los 34´y otro de Sanchez Miño al cierre del primer tiempo, Pablo Pérez en su regreso al equipo luego de la suspensión interna que le impuso Beccacece era la figura, la gente aplaudía hasta los laterales a favor, el rival no le creaba peligro y el planteo del técnico de presión alta estaba siendo ejecutado casi a la perfección. Era la reconciliación con la gente, desencantada por las últimas actuaciones. Era la llegada de la paz y la alegría.

Independiente ganó un partido increíble
El festejo de Cecilio Domínguez con Pablo Pérez y Palacios

Pero en los últimos 15 minutos, Beccacece sacó a Pérez (según lo dicho posteriormente por el técnico fue por pedido del jugador), el equipo sintió el cansancio (había jugado el jueves por Copa Argentina) y se fue quedando, Talleres creció y primero descontó a los 80´mediante un cabezazo de Tenaglia y seis minutos más tarde llegó al empate a través de Leonardo Godoy , la gente empezó a silbar y a reclamarle ganas a los jugadores, el equipo, ya sin Pérez en la cancha se desdibujó totalmente y no solo no presionaba sino que Talleres le entraba por todos lados y hasta Campaña parecía nervioso. Todo cambió en esos últimos quince minutos.

Pero si le faltaba algo a un partido que había tenido un claro dueño durante 80 minutos y un sorpresivo empate en los 10 últimos, era el gol de la justicia en el primer minuto agregado con un impecable cabezazo de Figal abajo, bien pegado al palo izquierdo de Herrera. Independiente se sobreponía al empate y conseguía un 3 a 2 no apto para cardíacos. La gente del Rojo al principio no lo gritó, pensando en que el goleador estaba fuera de juego y muy ocupada en insultar a todo lo que se moviera dentro del campo con una camiseta roja y al técnico Beccacece en particular. Pero estaba perfectamente habilitado y sirvió para embolsarse los tres puntos y dejar a Talleres sin la soñada punta del campeonato. Ahora habrá que preguntarse si ese gol agónico sirió para alcanzar la paz, o solo sigue siendo un bálsamo y si la gente recordará más los primeros 80 o los 10 últimos minutos de un partido increíble.

Independiente ganó un partido increíble
Figal grita su agónico gol que le dio la victoria a Independiente sobre Talleres.

Independiente: Campaña; Bustos, Franco, Figal y Silva; Lucas Romero (87´Benítez); Blanco, Pablo Pérez (77´Benavidez), Sánchez Miño y Cecilio Domínguez; Silvio Romero (43´Palacios). DT: Sebastián Beccacece

Talleres de Córdoba: Herrera; Godoy, Tenaglia, Gandolfi y Medina; Fragapane (68´Dayro Moreno), Navarro, Méndez y Pochettino (72´Payero); Menéndez (77´Guzmán) y Nahuel Bustos. DT: Alexander Medina