Ganó por primera vez el premio que otorga la FIFA al mejor jugador de la temporada.

Tuvo que esperar hasta la cuarta entrega para que se lo dieran. Pero todo llega. Lionel Messi fue premiado por la FIFA como el mejor jugador de la temporada pasada con el premio “The Best”. En la terna finalista estaban Cristiano Ronaldo y Virgil Van Dijk, el defensor holandés del Liverpool que para muchos era el favorito por haber obtenido la Champions League.

Leo ya había ganado cinco balones de oro. El primero en 2009, bajo el nombre de “Jugador Mundial de la FIFA” y los demás en 2010, 2011, 2012 y 2015, cuando tras la fusión de la revista France Football con la FIFA, pasó a llamarse “Balón de Oro”. En 2016 se termina la relación entre la revista y el organismo rector del fútbol y se instala el premio “The Best”, que hasta el día de hoy, Messi no había conseguido nunca. En 2016 y 2017 se lo llevó Cristiano Ronaldo y el año pasado Luca Modric. Al haberlo obtenido, se convierte por sexta vez en el mejor futbolista del mundo, aventajando a Cristiano por uno en esa competencia especial entre los dos astros del fútbol. El portugués, que fue considerado el número uno en 2008, 2013, 2014, 2016 y 2017, no asistió a la gala realizada en la Scala de Milán, tal vez intuyendo que no sería elegido.

Messi, the best
Los Messi en la gala de los premios “The Best”. Falta el más chiquito, Ciro, que se quedó en Barcelona.

Al momento de agradecer, Messi destacó estar por primera vez acompañado por su mujer Antonela y por dos de sus tres hijos, Thiago y Mateo. El más chiquito, Ciro, se quedó en casa.

Messi, the best
Jurgen Klopp, director técnico del Liverpool, agradece el premio “The Best” al mejor entrenador de la temporada pasada

También hubo otros premios en la gala. Como era de esperar, el técnico alemán del Liverpool, Jurgen Klopp, se quedó con el premio al mejor entrenador del año, aventajando a Mauricio Pellegrino (Tottenham) y Pep Guardiola (Manchester City). Marcelo Bielsa se llevó un sorpresivo premio fuera de programa al Fair Play, por el gesto de ordenar a su equipo dejarse hacer un gol por Aston Villa ante un fallo arbitral equivocado, hecho que le costó al Leeds quedar en zona de play-offs para ascender a la Premier League. El brasileño Alisson, del Liverpool, fue distinguido como el mejor arquero y la estadounidense Megan Rapinoe, del Reign FC, fue elegida la mejor futbolista femenina del mundo.