Derrotó ampliamente a Monfils y va por la corona en Austria ante Thiem, el ídolo local.

Continúa de parabienes Diego Schwartzman en tierra austríaca ya que venció al francés Gael Monfils por 6/3 y 6/2, en una hora y 14 minutos de partido, y se ubicó en la final del ATP 500 de Viena, donde se medirá con Dominic Thiem, el emblema tenístico de Austria en la actualidad. El número 5 del ranking mundial venció, tras ardua lucha, a una de las revelaciones del año, el italiano Matteo Berrettini por 3/6 7/5 y 6/3, en poco más de dos horas y media de desarrollo.

La final será disputada por dos amigos, que se conocen muy bien y que incluso han jugado dobles juntos. Thiem manda en el historial entre ambos por 4 a 2 y en el presente año se han repartido una victoria por lado. El austríaco ya está clasificado al Nitto ATP Finals, certamen que reúne a los ocho mejores de la temporada, mientras que el Peque tiene pocas chances, pero si alza el trofeo en Viena podrá hacer cuentas para estar presente en el O2 Arena de Londres, donde se juega el torneo de maestros.