Tokio tuvo la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos 2020, postergados por la pandemia de Coronavirus
Contra todo y contra todos, envueltos en polémicas, protestas, protocolos y aislamientos, los Juegos Olímpicos Tokio 2020 tuvieron su ceremonia inaugural y comenzaron un andar que tendrá al mundo pendiente hasta el 8 de agosto. Cecilia Carranza y Santiago Lange, medallistas de oro en Río 2016, fueron los abanderados de la delegación argentina.
Llegó el día, y siempre me emociono. El deporte, cada cuatro años, tiene su fiesta en la que trata de mostrar un mundo unido, hermanado detrás de mejores marcas, buscando los representantes de los distintos países ser más rápidos, saltar más alto o conseguir más tantos. Esta vez, hubo que esperar cinco años por la impensada pandemia de coronavirus.
Fue la vez que, en tiempos de paz, más cerca estuvieron de suspenderse los juegos. El Coronavirus se extendió por el mundo y realizar el encuentro deportivo mundial por excelencia resultó imposible. Sin embargo, esperando que con el correr de los meses la pandemia lograra contenerse., se decidió de manera inédita posponerlos un año.
Se alteraron tiempos de preparación en los atletas. Se comprimieron las fechas de otras competencias clasificatorias para permitir a quienes compiten conseguir las marcas correspondientes. Y cuando finalmente parecía estar todo listo, una nueva ola del virus golpeó al país organizador y se decidió que todo se desarrollara sin público.
Hoy, en el Estadio Olímpico de Tokio, que tiene una capacidad para 68.000 espectadores, solo había cerca de 950 personas autorizadas. Esa desolación fue muy bien maquillada por la organización de la fiesta inaugural, que sorprendió con algunos cuadros artísticos de gran calidad como la representación muy original de los pictogramas olímpicos y fuegos artificiales fantásticos.
El tiempo seguramente nos hará recordar algunos momentos particulares. La interpretación del tema “Imagine” de John Lennon que arranca con las voces de un coro de chicos japoneses y continúa con las voces de la africana Angélique Kidjo, el americano John Legend, Keith Urban desde Oceanía y el español Alejandro Sanz.
Llegado el turno del desfile de las delegaciones, la Argentina, primera representación latinoamericana en salir a la pista, dio la nota de alegría en una ceremonia algo mecánica. Argentina, encabezada por Cecilia Carranza y Santiago Lange, medallistas de oro en Río 2016, entra caminando cantando la canción de cancha “es un sentimiento” y en seguida transforma el desfile en un pogo emocionante difícil de olvidar. Los videos subidos por los atletas conmueven.
Otra sorpresa para los argentinos fue el ingreso de Paula “la Peque” Paretto como uno de los seis atletas que llevaron la bandera olímpica hasta el mástil donde fue izada. Un orgullo nacional la judoca, medallista olímpica de oro y de bronce en Río 2016 y Pekín 2008..
Sin dudas, uno de los momentos culminantes de toda ceremonia inaugural olímpica, es el encendido del pebetero con la llama olímpica. Y los organizadores mantuvieron en estricto secreto quién sería el o la encargada de hacerlo, hasta que la tenista Naomí Osaka fue la última posta de antorchas y subió las escaleras.
Los Juegos Olímpicos Tokio 2020, aunque un año más tarde, en este 2021, están en marcha. Las esperanzas argentinas también. Sin público, con muchos protocolos sanitarios y la ilusión intacta.
Llegó el día, y siempre me emociono. Contra todo y contra todos. La adversidad está para ser enfrentada y derrotada. Eso también es espíritu olímpico