Guillermo Guido es el Director artístico de los cruceros de la compañía italiana MSC.
Desde hace doce años, se embarca seis meses al año para brindar sus shows a los pasajeros. Con toda esa experiencia, nunca le había pasado algo tan impactante como lo que debió vivir por el coronavirus.
El barco quedó quieto en medio del río, a la espera de un puerto que lo recibiera. Habían partido el 7 de marzo, y debían atracar en Punta del Este. “Por suerte estaba con Mirna, así que esas horas de incertidumbre se hicieron más llevaderas”, cuenta Guido al diario Clarín. La presencia de su mujer lo ayudó a sobrellevar el mal momento.
“Después de doce años de vivir seis meses arriba de un barco te habituás a ese movimiento suave de navegación, lo sentís, es una costumbre que tenemos los tripulantes de sentir que el barco está andando, pero sentíamos que estaba parado, que no avanzaba y yo ya tengo por experiencia más o menos los horarios, cuánto tarda el barco de Punta del Este hasta Buenos Aires. Pensé: ‘sonamos, acá pasa algo porque esto no avanza’. Pasamos nuestra última noche parados en el río y cuando nos despertamos a la mañana vimos que estábamos frente a Montevideo. Parecía un barco fantasma”. dijo el cantante para cerrar.