Su Padre, Kirk Douglas tomó la mejor decisión
Hace menos de 24 horas, se conoció la Noticia, a través de un comunicado: “La mayor parte de la herencia del actor, cercana a los 75 millones de euros, irá destinada a la Douglas Foundation”, la organización benéfica creada por el fallecido actor y su mujer, Anne Douglas, en 1964. Según trascendió es posible que Michael Douglas no vea nada de esa herencia.
Lo importante es que Michael Douglas, no la necesita. la fortuna de este, se estima en unos 275 millones de euros. Falta aún por conocerse el destino de unos nueve millones de euros, que podrían repartirse entre la viuda, Anne, quien sigue siendo responsable de la fundación- y el resto de los hijos del actor.
La Douglas Foundation se creó hace 56 años, y sostiene varias entidades. Una de ellas es su alma mater, la St. James University, a la que durante años ha donado más de 7 millones de euros, para apoyar con becas a personas con dificultades económicas. Douglas, que se formó allí durante los peores años de la Gran Depresión, quiso así evitar a las nuevas generaciones las penurias que él tuvo que atravesar.
Ese destino final de la herencia de Kirk Douglas tampoco resulta sorprendente, considerando que ha donado a través de su fundación más de 25 millones de euros en distintas iniciativas. Al borde cumplir los 100 años, Kirk Douglas destinó 12,5 millones de euros para la construcción de un centro de cuidados para miembros de la industria del cine afectados por el Alzheimer.
Durante la pasada década, Anne Douglas y Kirk también donaron cerca de 10 millones de euros en distintas iniciativas pediátricas y preescolares -incluyendo la renovación de un centro de día en Los Ángeles que lleva el nombre del matrimonio. Y esto por citar sólo las más llamativas -junto a la renovación del Cine Culver/Kirk Douglas, una sala de 1946 restaurada en 2002 con un fondo de 7,4 millones de euros-.
Michael Douglas dijo el día de su muerte: “La vida de Kirk fue bien vivida, y deja un legado en el cine que perdurará en las generaciones venideras y una historia como un reconocido filántropo que trabajó para ayudar al público y traer la paz al planeta”.
“Para el mundo era una leyenda, un actor de la época dorada de las películas que vivió bien en sus años dorados, un humanitario cuyo compromiso con la justicia y las causas en las que creía establecieron un estándar al que todos aspiramos. Pero para mí y mis hermanos Joel y Peter, él era simplemente papá, para Catherine, un maravilloso suegro, para sus nietos y bisnieto, su amoroso abuelo, y para su esposa Anne, un esposo maravilloso”.
