La UIF pidió ser querellante en la causa Vicentín, investigan si la cerealera simuló su estado de cesación de pagos

La Unidad de Información Financiera (UIF) pidió ser querellante en la causa Vicentín, el organismo investiga irregularidades sobre la cesación de pagos. A su vez se sospecha si la empresa fugó y lavó dinero, es por ese motivo que la AFI pidió ser querellante. La causa además investiga préstamos irregulares por 18.100 millones de pesos otorgados por el Banco Nación presidido por Javier González Fraga, durante el gobierno de Mauricio Macri.

 En ese sentido, el juez federal Julián Ercolini habilitó la feria judicial para que se agilice la gestión del caso y del expediente. Mientras tanto, Gonzalez Fraga junto a los responsables de la firma Vicentin, Alberto Padoán y Gustavo Nardelli están imputados por el fiscal federal Gerardo Pollicita. El próximo paso en la causa será realizar una inhibición de bienes a González Fraga y a los responsables de la firma, como también al ex presidente, Mauricio Macri y otros funcionarios.

En el mes de noviembre de 2019, el Banco Nación le entregó a la firma 5785,4 millones de pesos cuando la misma ya se encontraba en recesión. El origen del préstamo fue por una linea de prefinanciación de exportaciones que se incrementó durante la gestión de Mauricio Macrientre 2015 y 2019 pasó de 150 a 300 millones de dólares

La exportadora Vicentin, al momento de la convocatoria de acreedores, acumuló un total de 18.182,3 millones de pesos. Y la tercera parte, es decir, los 5785,4 millones, se le entregaron en el mes de noviembre de 2019, cuando la empresa ya se encontraba en cesación de pagos. Así figura en el legajo del Banco Nación el expediente en el que se tramita dicha convocatoria.

La presentación de la AFI:

Según compartió el medio Página12, la presentación del organismo explica que Vicentín forma parte de una red corporativa integrada por 16 firmas del país y otras de Uruguay, Paraguay, Brasil y España. En este grupo se encuentra la firma Renova, socia del grupo Glencore, y que es una empresa investigada por el lavado de activos. En tanto, a Glencore se la relaciona con firmas off shore en Bermudas, Islas Caimán y distintos paraísos fiscales, según figura en los archivos de Paradise Papers.

“Existen indicios que nos permiten sostener que Vicentin no solo habría simulado su estado de cesación de pagos sino que, a su vez, habría utilizado su estructura en el exterior y/o Glencore para remitir sus ganancias al extranjero” explica la AFI. A su vez explica la defraudación al Estado a través de los créditos millonarios y que éstos “serían delitos precedentes de maniobras de lavado

La hiopótesis del organismo expresa que “el grupo empresario que integra (Vicentin) contaría con una situación económico-financiera saludable y habría remitido buena parte de sus ganancias al exterior mediante maniobras, que se presentan al menos como sospechosas”. Y pide una investigación de la relación entre Vicentin y Glencore para “determinar la trazabilidad del dinero que debió utilizarse para pagar las obligaciones que la firma había contraído con el Banco de la Nación Argentina”