Las nuevas víctimas estaban jugando a los dados en una calle de Johannesburgo, capital de Sudáfrica. Otras 46 personas habían sido ultimadas en las últimas horas
Sudáfrica sigue bajo una inusitada escala de violencia que culmina en masivos crímenes y en las últimas horas cuatro personas fueron asesinadas a tiros en una calle de la capital, Johannesburgo, mientras que dos resultaron heridas.
Fuentes oficiales de Sudáfrica contaron que la nueva agresión se produjo la noche del sábado y las víctimas estaban jugando dados en la vía pública. “Fueron atacados sin razón aparente”, admitió el jefe de la policía regional, Elias Mawela, y agregó que hubo que lamentar “otra espantosa escena del crimen”. Hasta el momento nada se sabe de los autores del hecho, que están siendo intensamente buscados por las autoridades.
El fin de semana pasado, 16 personas fueron acribilladas en un bar en Soweto, cuando un grupo de atacantes abrió fuego contra una multitud, la noche del sábado al domingo. En paralelo, en Pietermaritzburgo, en el este de Sudáfrica, en la región zulú, cuatro sujetos fueron asesinados por dos hombres que abrieron fuego de forma indiscriminada contra los asistentes de otro bar. Los portavoces policiales precisaron que el modo de operar de ambos grupos fue similar.
Los dos incidentes ocurren un año después de la peor ola de violencia que vivió el país desde el final del apartheid y la llegada de la democracia.
Además, se producen tras el deceso por envenenamiento de 26 individuos en Cabo Oriental, el pasado 26 de junio, también en un bar.
