
Si se implementa diariamente mejorará no sólo la salud física, también la salud mental. Previene enfermedades, aumenta la energía y fortalece tanto el sistema óseo como el muscular
La actividad física es un pilar fundamental para mantener una buena salud física y mental. La Organización Mundial de la Salud (OMS) da recomendaciones esenciales para guiar a las personas hacia un estilo de vida más activo. Según la OMS, incluso pequeñas cantidades de ejercicio pueden marcar una diferencia significativa. Con estrategias adecuadas y un compromiso colectivo, es posible realizar actividad física mejorando la calidad de vida de millones de personas en todo el mundo.
La OMS establece que los adultos deben realizar al menos 150 a 300 minutos de actividad física moderada a la semana o 75 a 150 minutos de actividad física vigorosa. Estas actividades deben alcanzar entre el 60% y el 80% del ritmo cardíaco máximo. Además, se recomienda complementarlas con ejercicios de fortalecimiento muscular al menos dos veces por semana.
Directrices de la OMS recomiendan hasta 300 minutos de actividad física moderada semanal para adultos, esto podría significar caminar durante una hora durante cinco días de 7 que tiene una semana a un ritmo lento. “El aumento de beneficios es más significativo cuando se alcanzan estos mínimos consejos”, afirmó Regina Guthold, epidemóloga de la OMS. Esta dosis mínima contribuye a prevenir enfermedades y mejora la salud mental y el bienestar general, según estudios publicados en la revista The Lancet.
La OMS define el sedentarismo como actividades de bajo gasto energético, como sentarse o reclinarse, y alerta sobre su impacto negativo en la salud. Para contrarrestarlo, recomienda:
La OMS enfatiza que incluso pequeñas cantidades de ejercicio son beneficiosas. “Incluso un poco de actividad es mejor que ninguna y cada movimiento cuenta”, afirman en el comunicado. Mantenerse activo es una inversión esencial para la salud física, mental y emocional. Cumplir con las recomendaciones mínimas de la OMS es una forma efectiva de prevenir enfermedades y mejorar la calidad de vida, incluso en un mundo con exigencias diarias crecientes.