28/04/2025 - Edición Nº811

Deportes


Un templo del fútbol

De Juan Pablo II a Francisco: el único estadio de Argentina que recibió a un Papa

28/04/2025 | Jorge Bergoglio en su etapa como cardenal en Buenos Aires, protagonizó grandes eventos para congregar a los fieles. Muchos años antes, el Papa Juan Pablo II visitó el país y debió elegir un lugar para realizar una misa multitudinaria.



El Papa Francisco fue el más futbolero en ocupar el trono de San Pedro y en concebir el poder del deporte para predicar el evangelio a escala global. En su etapa como Cardenal en Buenos Aires, vivió de cerca cómo el fútbol une y moviliza a cientos de miles de personas.

Por eso, en su tarea pastoral, recurrió en distintas ocasiones a clubes de fútbol, no sólo para trabajar en conjunto sino también para utilizar sus instalaciones construidas y preparadas para albergar multitudes.

Entre 1998 y 2007, Jorge Bergoglio encabezó distintas misas y eventos en los estadios de Boca y Vélez, destinados a jóvenes de escuelas y comedores del conurbano bonaerense y la ciudad de Buenos Aires. Pero la Bombonera y el de Liniers no fueron las únicas canchas en recibirlo.

Entre octubre de 2004 y 2005, el Papa Benedicto XVI estableció el “Año de la Eucaristía”. Monseñor Juan Horacio Suárez, entonces obispo de Gregorio de Laferrere organizó el Primer Congreso Eucarístico Diocesano y eligió como lugar el estadio de Deportivo Laferrere. Suárez jugó de local y la misa de cierre estuvo a cargo del propio Cardenal Bergoglio.


Jorge Bergoglio como Cardenal en el estadio de Deportivo Laferrere.

Cómo se gestó la única visita de un Papa a un estadio en Argentina

El estadio José Amalfitani de Vélez Sarsfield ostenta una marca única en el fútbol argentino: es el único que recibió a un Papa, a raíz de la segunda visita de Juan Pablo II al país, entre el 6 y 12 de abril de 1987. La gira papal fue en el marco de la primera edición de las Jornadas Mundiales de la Juventud realizada fuera de Roma y coincidió con el Domingo de Ramos. Fue la primera vez en la historia que un Papa no estaba en la ciudad italiana para celebrarlo.

La visita del sumo pontífice se comenzó a gestar con anticipación, justo cuando el arquitecto Francisco Antonio Pérez asumió la presidencia de Vélez. Venía de ser el número dos del histórico Ricardo Petracca, un dirigente deportivo muy recordado en Liniers y en AFA.

Para la recepción del Papa, el presidente Pérez trabajó en conjunto con el entonces Arzobispo Juan Carlos Aramburu. El sumo pontífice llegó a la Argentina el 6 de abril de 1987 y el viernes 10 de ese mes, a las 08:15 am, se trasladó desde la Nunciatura Apostólica al estadio de Vélez en Liniers. El campo de juego se transformó en un templo y sobre la tribuna oeste se montó un enorme altar, donde Juan Pablo II celebró misa ante más de 50.000 personas.