Barcelona e Inter empataron en un partidazo épico por la Champions League

El Estadio Olímpico de Montjuic fue escenario de un partido épico entre Barcelona e Inter, que terminó igualado 3-3 en la ida de las semifinales de la Champions League. En un duelo marcado por la intensidad, los golazos y las remontadas, ambos equipos dejaron la serie completamente abierta para la vuelta en el Giusseppe Meazza, el 6 de mayo.

El encuentro comenzó con un golpe inmediato del conjunto italiano. Marcus Thuram, en apenas 34 segundos, aprovechó un centro preciso de Denzel Dumfries desde la derecha y definió con un taco exquisito para el 1-0. El gol tempranero que desconcertó a todos, pero ya presagiaba un partido electrizante.

Poco después, al minuto 21, Dumfries volvió a aparecer: luego de un córner desde la derecha, voló para definir con una tijera espectacular y aumentar la ventaja del Inter, que a esa altura ya controlaba el juego. Pese a ello, el Barcelona reaccionó rápidamente con Lamine Yamal, la joya blaugrana, que descontó a los 24' con un zurdazo dentro del área (y el palo se lo negó a los 27), pero la igualdad llegó al fin gracias a Ferran Torres, que con un simple toque en el área chica la empujó a la red a los 37 minutos.

Hasta entonces había conformidad en los cuerpos técnicos, pero la mala noticia del partido (para el Inter y para Lionel Scaloni), fue la lesión de Lautaro Martínez antes del cierre de los primeros 45 minutos. Una molestia muscular lo obligó a abandonar el campo y ser reemplazado por Mehdi Taremi. 

En la segunda mitad, la dinámica del partido siguió cargada de emociones. Dumfries, que terminó siendo la figura, volvió a ser protagonista a los 59 minutos, esta vez con un cabezazo  tras un centro de Federico Dimarco que puso el 2-3 a favor del Inter. Cuando parecía que los italianos se llevarían la victoria, una jugada preparada que empezó en un tiro de esquina encontró los botines de Raphinha, que con un potentísimo disparo de 30 metros decretó la igualdad a los 65'.

Como si le hubiese faltado algún condimento a este plato de buen fútbol, el VAR anuló un gol del Inter por apenas ¡el dedo de un pie! Sucedió a la media hora del complemento cuando el armenio Henrick Mkhitaryan se filtró sin marca por el segundo palo y empujó el balón al fondo de la red, celebrando el 4-3. Sin embargo, el árbitro Clément Turpin invalidó la jugada por posición adelantada y, tras la revisión del sistema, confirmó una decisión que desató polémica por el mínimo margen, la punta de su botín.

Con el 3-3 sellado, la eliminatoria se decidirá en Milán, donde Barcelona buscará imponerse para alcanzar la final de Wembley, mientras que el Inter intentará rezar por una pronta recuperación del Toro y hacer valer su localía.

El duelo entre ambos equipos será a todo a nada, pero también será una batalla táctica entre Xavi Hernández y Simone Inzaghi que los puede dejar a un paso de la Orejona.