
por Fede Carestía
Un reciente estudio de la consultora Nielsen reveló que el consumo de televisión en 2025 está adoptando patrones que recuerdan a la televisión tradicional, con un marcado predominio de plataformas con publicidad. Según el informe, el 72.4% del tiempo dedicado a ver TV (en Estados Unidos) durante el primer trimestre del año se destinó a plataformas con anuncios, ya sea canales de cable, redes abiertas o servicios de streaming con publicidad. Solo el 27.6% del visionado fue libre de comerciales, lo que señala un cambio cultural en cómo las audiencias interactúan con servicios como Netflix, Disney+ y otras aplicaciones de streaming.
El streaming, que continúa ganando terreno, representó el 42.4% de todo el consumo de televisión con publicidad en el período analizado. Este dato destaca el auge de las versiones con anuncios de plataformas como Netflix (que todavía no se aplica en Argentina, donde solo pasa con los eventos en vivo) y Disney+, que han introducido opciones más económicas para atraer a usuarios sensibles al precio. A medida que estas plataformas amplían sus catálogos y ofrecen tarifas reducidas a cambio de comerciales, el modelo de consumo se asemeja cada vez más al de la televisión de antaño, donde los anuncios eran parte integral de la experiencia
Este cambio coincide con una transformación en las políticas de las plataformas, especialmente en torno al uso compartido de contraseñas. Netflix ha liderado esta tendencia al prohibir el intercambio de cuentas entre distintos hogares, ofreciendo en su lugar la opción de “agregar casas” por un costo adicional. Disney+ y Max están siguiendo un camino similar, implementando restricciones que buscan maximizar ingresos por suscripción.
Actualmente, Paramount+ se destaca como la plataforma de streaming más accesible del mercado, con un precio mensual de $1321,49 o una suscripción anual de $11893,25, equivalente a 12 meses por el costo de 10. A diferencia de otras plataformas, ofrece un único plan sin niveles ni publicidad.