11/05/2025 - Edición Nº824

Deportes


Torneo Apertura 2025

Ganó Boca, pasó a cuartos de final y estalló la grieta en la Bombonera

11/05/2025 | Se impuso por penales a Lanús en un estadio a cabildo abierto, con insultos a la CD que encabeza Riquelme.


por Gustav Salvestrini


En una noche de sentimientos encontrados, el partido de Boca Juniors por los octavos de final del Torneo Apertura de la Liga Profesional de Fútbol, claramente terminó siendo algo secundario. 

Las grandes chances erradas por Lanús, los curiosos cambios de Mariano Herrón, el partido estelar de Milton Delgado y la intensa tanda de penales, quedaron opacados por la “guerra civil” que presenciaron todos los socios de Boca en las tribunas del Alberto J. Armando. Un acontecimiento muy triste para todo hincha xeneize.

Hoy en Argentina, la palabra "grieta", está cada vez más de moda. Cristina Kirchner, Mauricio Macri, Javier Milei, Horacio Rodríguez Larreta, Axel Kiciloff, Juan Grabois y Sergio Massa entre tantos otros, son los grandes responsables.

Se dividió a la sociedad argentina profundizando el odio, la falta de respeto y la intolerancia entre todos los ciudadanos argentinos. Hace unos años, este mismo fenómeno llegó también al Club Atlético Boca Juniors y claramente estalló en el partido de anoche contra el Club Atlético Lanús, con reproches cruzados entre los socios.

¿Cómo comenzó la grieta política en Boca?

Todo arranca en el año 2007, en la previa a las elecciones en las que Pedro Pompilio se consagró como nuevo presidente de la institución.

En aquel entonces, empezó a trazarse una interna política muy fuerte en el club. Mauricio Macri, ya como jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, tenía grandes diferencias con su sucesor, por la cual Pompilio casi se queda sin el cargo estelar que igualmente luego terminaría asumiendo. Gracias a esas diferencias, los seguidores tanto de Pedro como de Mauricio, terminaron completamente distanciados.

Posteriormente, en el año 2008, con el inesperado fallecimiento de Pompilio, Boca quedaría a la deriva de la mano de Jorge Amor Ameal, quien se apoderó del club con muchas polémicas. Por eso, varias agrupaciones le reclamaron que llamara a elecciones inmediatamente, algo que Ameal no acató y varias personalidades importantes del Mundo Boca se pusieron en su contra.

Todo esto no quedaría ahí y en los siguientes años nuevamente hubo una gran interna macrista, que terminó con Daniel Angelici como presidente hasta el 2019. Ese año, el oficialismo perdió el poder completo en manos de la lista de Jorge Amor Ameal y Juan Román Riquelme. El arribo del máximo ídolo del club, generó un odio inmenso por parte de todo el conjunto de la oposición y despertó una división política sin antecedentes en la historia del club.

Muchos dicen que la grieta con Juan Román Riquelme es de origen social, otros que nace del plano ideológico y hay quienes afirman que es por su entorno de trabajo y futbolístico. Pero lo que claramente todos podemos ver, es que esta grieta explosiva está dañando a una de las mayores instituciones de fútbol del mundo como lo es el Club Atlético Boca Juniors.


Macri y Riquelme, los grandes protagonistas de la política de Boca.

¿Mauricio Macri es el culpable de la grieta? ¿Daniel Angelici? ¿o Juan Román Riquelme? La respuesta es que todos lo son. Y si Boca no le pone un freno a este odio interno, la situación va a empeorar.

La comisión directiva actual aún está a tiempo de reaccionar y consensuar con la oposición sinergias en conjunto por el bien de todo el pueblo xeneize. El actual oficialismo, hoy tiene el deber de poner paños fríos y terminar con esta grieta lamentable que lleva ya casi dos décadas.

En 1905; cuando Baglietto, Scarpatti, Sana y los hermanos Farenga se juntaron a fundar con una inconmensurable pasión al Club Atlético Boca Juniors jamás hubiesen pensado que el hincha de Boca estaría tan dividido como hoy. Ante esta situación, ellos mismos convocarían a todos los socios para ponerle fin a esta situación, tirando todos juntos para adelante alentando a esta hermosa religión azul y oro.

Se viene Independiente, y todos los hinchas de Boca esperan este partido como una nueva final. Como antaño, puede ser un partido memorable.