13/05/2025 - Edición Nº826

Policiales

Parque Chacabuco

Un jubilado español murió de un infarto tras un robo y sospechan de la nieta de su cuidadora

13/05/2025 | Tenía 79 años. Fue asaltado por dos delincuentes en su casa durante la madrugada. Estaba acompañado por una joven de 20 años, quien quedó demorada por contradicciones en su relato.



Un jubilado murió de un infarto este lunes a la madrugada luego de ser víctima de un violento robo en su vivienda del barrio porteño de Parque Chacabuco, donde vivía con asistencia permanente. La policía investiga las circunstancias del hecho y sospecha que la nieta de la cuidadora que lo acompañaba podría haber participado del asalto.

El episodio ocurrió alrededor de las 3 de la madrugada en una propiedad ubicada en la calle José Manuel Estrada al 900, donde vivía Mario Villanueva, de 79 años y nacionalidad española. Según la primera versión, dos delincuentes ingresaron a la vivienda, redujeron al jubilado y a su cuidadora —una joven de 20 años que estaba reemplazando a su abuela en esa tarea— y los encerraron en una habitación, para luego robar y huir del lugar.

Minutos después de que los asaltantes escaparan, la joven notó que el hombre no respondía a los estímulos y llamó al SAME, pero cuando los profesionales médicos arribaron constataron que ya había fallecido. La causa fue atribuida a un infarto agudo de miocardio, sin signos de violencia física visibles.

La División Homicidios de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires llegó al domicilio poco después y entrevistó a la joven, quien ofreció su versión de los hechos. Sin embargo, los investigadores encontraron inconsistencias en su relato y comenzaron a sospechar una posible participación o encubrimiento. Por este motivo, la mujer fue demorada, mientras se analizan las cámaras de seguridad, llamados y movimientos previos para determinar su grado de responsabilidad.

Fuentes del caso confirmaron que no se encontraron lesiones ni signos de lucha en el cuerpo del jubilado, lo que refuerza la hipótesis de una muerte natural como consecuencia del estrés provocado por la situación de encierro durante el robo.

La causa fue caratulada como “robo” y quedó en manos de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 9, a cargo del fiscal Carlos Herrera, quien ordenó las primeras medidas investigativas y dispuso preservar el lugar del hecho.

LN