
Nigeria tiene un serio y recurrente problema de violencia extrema en sus estadios de fútbol profesional. Esta vez, le tocó a Vincent Temitope, atacante del Plateau United, que sufrió un corte en el cuello con hemorragia en plena cancha.
La agresión tuvo lugar luego de que el delantero hiciera un gol en la final de la liga nigeriana, que su equipo además terminó perdiendo.
"Unos hinchas planificaron un ataque contra él, provocándole un corte en el cuello con hemorragia", explicó Yaksat Maklet, director del club, en un comunicado oficial.
El incidente deja en evidencia la escalada de violencia que sufre el país, sobre todo en los estadios de fútbol, donde los enfrentamientos entre hinchas y jugadores son cada vez más frecuentes.
¿Cuáles son los hechos de violencia más recientes en el fútbol de Nigeria?
Una semana antes del ataque a Temitope, los jugadores del Ikorodu City fueron retenidos durante hora y media en los vestuarios del estadio en Ibadan, después de empatar contra los Shooting Stars, en un episodio de violencia que tuvo que ser reprimido por las fuerza de seguridad.
En marzo de 2022, cientos de hinchas invadieron el campo tras la eliminación de la selección nigeriana en la clasificación para el Mundial de Qatar. Los incidentes terminaron con la policía lanzando gases lacrimógenos para dispersar a la multitud.
También en 2022, el entrenador de arqueros de los Shooting Stars fue golpeado por un directivo de un equipo rival. Sin embargo, la violencia no es el único problema del fútbol nigeriano. También hay serias sospechas de corrupción en el arbitraje, arreglo de partidos y falta de control.
Esto motivó el mes pasado que la Federación Nigeriana de Fútbol (NFF) envíe un comunicado a todos los árbitros de todos las categorías, recordando que es “obligatorio respetar los principios de equidad, imparcialidad y de justicia". Demasiado poco para un fútbol con problemas de corrupción y violencia estructurales.