
por Ramiro Solveyra
El excandidato a presidente del Club Atlético River Plate, Antonio Caselli, hizo una publicación en Instagram a favor de La Libertad Avanza y festejó el triunfo de Manuel Adorni en las elecciones legislativas realizadas el último domingo en la Ciudad de Buenos Aires.
El empresario busca disputarle el apoyo del Gobierno Nacional a Matías Patanian, actual vicepresidente del club y CEO de Aeropuertos Argentina 2000. También a Rodolfo D’Onofrio, extitular de la institución y un hombre muy cercano al presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Martín Menem.
Caselli, exembajador de la Orden de Malta, la tiene muy difícil en este aspecto, ya que Javier Milei tiene una relación histórica con el vicepresidente primero de River. Ambos se conocen por haber trabajado juntos en el grupo de Eduardo Eurnekian durante muchos años. El “armenio” como lo llaman en su intimidad, fue fundamental para que el actual dueño del sillón de Rivadavia ingrese al mundo de los medios de comunicación.
Por más que se niegue internamente, el mundo River está atravesado por la política nacional y a diferencia de otros clubes, convergen prácticamente todas las fuerzas partidarias: desde el dirigente de la izquierda socialista Rubén “Pollo” Sobrero, que es opositor, hasta Agustín Forcheri, diputado del PRO bonaerense y actual prosecretario de la institución. Inclusive el propio presidente del club y titular del Banco Macro, Jorge Brito, tiene una estrecha relación con Sergio Massa.
Este alineamiento político de Antonio Caselli hacia el Gobierno hizo mucho ruido en las esferas riverplatenses, ya que Javier Milei tiene una posición política muy crítica sobre el formato jurídico de los clubes como asociaciones civiles sin fines de lucro, por lo que sorprendió su alineamiento público.
En este sentido, es importante recordar que el dirigente opositor fue accionista del Burgos CF, un club español que se encuentra en la segunda división y su gestión terminó siendo muy cuestionada por los socios. A causa de falta de pago y una suma de deudas durante el 2021, tuvo como desenlace la vuelta de los antiguos dueños del Burgos donde volvieron a tomar el control del 85% del paquete accionario que pertenecía a los Caselli, quienes siguen conservando el 10% restante. El otro 5% le pertenece a pequeños accionistas.
Sin embargo, la versión que dio el exdueño es otra: "cuando compré el Burgos valía cero. Cuando lo dejé, el 71 por ciento del club tenía un valor de 17,7 millones de euros". Sin embargo, su posición en torno a las SAD ha sido ambigua y en una entrevista realizada para La Nación, planteó que “los inversores argentinos van a terminar invirtiendo en clubes del ascenso y en ligas más chicas como la uruguaya”.
En ese sentido, señaló que “Boca y River no se van a privatizar, mientras que los capitales extranjeros van a apuntar a la clase media del fútbol argentino: los clubes medianos porteños y los grandes del interior”.
Caselli fue candidato a presidente en las últimas 4 elecciones de River. En 2021, terminó tercero con el 11% de los votos pese a compartir fórmula con un referente como David Trezeguet, y ahora aspira a ser protagonista en la elección que se dará a fin de año en el club y necesita subirse a la ola violeta para tener mayor empuje desde arriba.