28/05/2025 - Edición Nº841

Deportes


De La Boca a Palermo

A 90 años del inicio de la construcción del Monumental: cómo llegó River a Núñez

26/05/2025 | La historia de cómo José Bacigaluppi y Antonio Vespucio Liberti trasladaron el estadio a Zona Norte.



La primera cancha del Club Atlético River Plate estaba ubicada en la Carbonera Wilson, en el lado este de la Dársena Sur, donde jugó desde 1901 hasta 1906. Luego, ocupó un terreno en Sarandí, Avellaneda y en 1907 volvió a La Boca, a sus orígenes, en el sector opuesto a su primer reducto.

En esa época se logró el ascenso en 1908 y fue subcampeón un año más tarde. Sin embargo, las malas noticias llegaron cuando el jefe del puerto intimó al club a dejar el predio, ya que no se había pagado por él. 

Los dirigentes acordaron postergar el desalojo mientras se construía un nuevo estadio. Pero al promediar 1914 las autoridades del puerto no esperaron más y River debió hacer de local en la cancha de Ferro. Como el club había crecido, el nuevo estadio era más grande, con dos tribunas, una sobre la calle Caboto y otra sobre Pinzón, y se inauguró en 1915.

En 1921 el presidente José Bacigaluppi impulsó la mudanza del estadio a la zona de Palermo, después de analizar el crecimiento del club y el desarrollo de la ciudad. El lugar elegido estaba en las antípodas de La Boca, ahí vivía la clase aristocrática de la ciudad, y los dirigentes presentaron resistencias a la idea, por el arraigo y la rivalidad con el Xeneize.

Pero Bacigaluppi siguió firme en su postura y negoció por la manzana de avenida Alvear y Tagle, ante las autoridades del Ferrocaril. El momento más difícil de las gestiones fue ante el intendente que exigió que la parte de la cancha que daba a la avenida Alvear mantuviera el estilo del lugar.

El mandamás riverplatense acudió a la ayuda del arquitecto Bernardo Messina, uno de los fundadores del club, para que diseñe los planos de acuerdo a las exigencias municipales. Messina en seis horas hizo unos planos fenomenales con una fachada acorde a la zona. River no tenía el dinero para hacer todo lo que figuraba, pero igual lo presentaron y fue aprobado. Tiempo más tarde, el socio de River fue suspendido como arquitecto por hacer esos planos, pero la construcción había empezado en 1922 y ya era imposible de frenar.

Desde los bosques de Palermo hacia el norte, no había casi edificación y era prácticamente un desierto. Pero hubo alguien que mientras todos veían pastizales, vio una gran oportunidad: Antonio Vespucio Liberti, quien antes había apoyado la idea de Bacigaluppi.


El día de la inauguración del Monumental.

La visión y la grandeza de Antonio Vespucio Liberti

Liberti imaginó un estadio bien grande y de cemento, como el que había inaugurado Independiente en 1928. Por supuesto que cuando lo propuso a los dirigentes, le valió ser señalado como un loco, utópico e irresponsable, porque el terreno estaba ubicado prácticamente en un pantano, tierras muy bajas e inundables cerca del río.

Incluso, cuando fue a visitar el predio junto a un grupo de dirigentes, uno de ellos, muy descreído de todo el proyecto se dirigió hacia Liberti y le dijo: “Mira Antonio, estos terrenos sólo sirven para esto” y acto seguido empezó a orinar sobre la tierra. De ese ignoto y desconocido dirigente poco se sabe, de Antonio Vespucio Liberti, que fue uno de los mejores presidentes que tuvo el fútbol argentino.


La segunda etapa de construcción del Monumental.

Finalmente, el 13 de julio se compró el terreno y el 31 de octubre de 1934 se firmaron los papeles. Eran 83.950 metros cuadrados, de los cuales 35.000 eran de la Ciudad de Buenos Aires y el resto del Hipódromo Nacional. River pagó 1.500.000 pesos y gran parte de la financiación la obtuvo por un préstamo del Banco Nación.

El 25 de mayo de 1935 el mismo Liberti colocó la piedra fundamental en el predio de avenida Centenario y Río de la Plata, día en que se cumplían 34 años de la fundación del club. El 1º de diciembre de ese año la comisión directiva presentó a los socios, en una Asamblea Extraordinaria, los planos aprobados y la reseña detallada de las obras a realizar. Las obras empezaron el 27 de septiembre de 1936 y nunca más pararon.