El Frente Renovador llega fortalecido a los comicios, mientras la oposición fragmentada lucha por sobrevivir

Misiones va a las urnas este domingo para renovar veinte bancas entre diputados provinciales y concejales en diez municipios, con doce espacios políticos compitiendo. En un escenario marcado por la atomización opositora, el Frente Renovador aparece como el claro favorito, con un respaldo que ronda el 50% y que le permitiría mantener la mayoría en la Legislatura.

El oficialismo presenta al Sebastián Macias, presidente de Vialidad provincial, como su candidato estrella para las legislativas. Apoyado en una gestión que garantiza estabilidad económica y orden, encabeza un proyecto que combina la tradición política local con un aire fresco aportado por jóvenes con ideas libertarias.

Un reciente estudio de la consultora Analía del Franco divide el mapa electoral misionero en tres niveles. En el primero, el Frente Renovador domina con fuerza y podría quedarse con 12 de las 20 bancas en disputa, dependiendo de cómo se distribuyan los votos opositores.

Los dos niveles siguientes están ocupados por la oposición, conformada por once espacios que llegan fragmentados y sin acuerdos. Esta dispersión dificulta sus aspiraciones y convierte la elección más en una disputa interna que en un desafío al oficialismo.

Entre los opositores sobresalen los libertarios. La Libertad Avanza (LLA), con el extenista Diego Hartfield como cabeza de lista, aparece como la principal fuerza disidente, con un 20% de intención de voto y la posibilidad de obtener cuatro bancas. En tercer lugar se ubica el Partido Libertario (PL), liderado por Martín Arjol, que cuenta con alrededor del 8% de los votos.

Otro nombre para seguir es el del expolicía Ramón Amarilla, quien lidera el partido “Por la Vida y los Valores”. Pese a su bajo reconocimiento, su perfil ajeno a la política tradicional y su rechazo al oficialismo le permiten aspirar a una banca, con un estimado del 6% de apoyo.

Finalmente, en un escenario sin peronismo, el Agrario y Social (PAyS) de Héctor “Cacho” Bárbaro se presenta como la principal oposición antimileísta, aunque no es el único espacio no libertario que busca captar votos en esta elección fragmentada y con múltiples frentes en pugna.