
“Quiero informarles que tuvimos el fallecimiento de Thiago. Es muy doloroso para todos, más para nosotros dos, ella es la mamá. Vinimos acá para informarles eso". Con esas palabras el papá del nene de 7 años que fue baleado en La Matanza confirmó esta noche su muerte.
Thiago Correa estaba internado en grave estado en el Hospital de Niños de San Justo con una herida de bala en la cabeza, producto de un disparo realizado aparentemente por un oficial de la Policía Federal que resistió un robo en la localidad de Ciudad Evita y corrió a los tiros a los cuatro presuntos delincuentes.
El hecho ocurrió en la intersección de avenida Crovara y Madrid. Fabián, el padre del chico, había alzado a su hijo sobre los hombros mientras esperaban el colectivo. En ese momento, el agente de la Policía Federal Facundo Aguilar Fajardo fue abordado por delincuentes armados. Según reconstruyeron los investigadores, el efectivo se identificó, sacó su arma reglamentaria y disparó.
“Cuando estábamos esperando el colectivo, escuché una explosión y pensé que era una moto, pero de repente empezaron a escucharse más detonaciones. Cuando me di cuenta de que se estaban agarrando a tiros, quise tirar al piso a Thiago, pero ya le había impactado una bala”, relató Fabián, el padre del niño.
El niño fue trasladado primero al hospital Ballestrini y luego derivado al Hospital de Niños de San Justo, donde permaneció internado con asistencia mecánica. Este viernes, su fallecimiento fue confirmado por su familia. "Pido disculpas, muchas gracias por estar. Necesito justicia por Thiago, por favor. Esto se tiene que pagar como tiene que ser”, expresó Fabián ante los medios. A su lado estaba la madre del niño, en silencio, marcada por el mismo dolor.
Horas antes, el papá había relato cómo fue el momento exacto del disparo: “Cuando le da el impacto y lo tengo en mis brazos, me dice ‘pá’ y ya no dijo más nada. Empecé a gritar ‘ayuda’ y apareció un auto con un hombre que no conozco y me llevó al hospital”.
A raìz de ello, el oficial que disparó fue demorado preventivamente y este viernes el fiscal pidió su detención al entender que hubo exceso en el uso de la legítima defensa y sospechas de haber alterado la escena del crimen, donde curiosamente los peritos no hallaron las vainas servidas de su pistola reglamentaria.
LN