
La Agremiación Médica Platense lanzó una advertencia contundente sobre el estado crítico que atraviesa el sistema de salud privada en la provincia de Buenos Aires.
En un comunicado difundido recientemente, los profesionales aseguran que la situación es insostenible y que se ha llegado a un punto límite que requiere acciones inmediatas y coordinadas.
Según expresaron, el deterioro del sistema no es reciente, sino que se arrastra desde hace años como consecuencia de la falta de diálogo, decisiones ineficaces, presupuestos insuficientes y, fundamentalmente, la falta de reconocimiento hacia el trabajo de los médicos.
Esto ha provocado una notable pérdida de calidad en la atención y un alarmante nivel de saturación. Pese a que la relación entre médicos y habitantes en Argentina y particularmente en la provincia es una de las más altas del mundo, el acceso a la atención médica se ha vuelto cada vez más restringido.
Las demoras en los turnos, la imposibilidad de realizar prácticas quirúrgicas o complementarias, y el abandono progresivo de la profesión por parte de muchos médicos, forman parte de un panorama preocupante.
Desde la entidad médica afirman que el problema no es la falta de profesionales, sino las condiciones en las que deben trabajar.
Denuncian honorarios desactualizados, gastos mal cubiertos y una creciente desmotivación que empuja a los médicos a dejar la práctica. En este contexto, la Agremiación hace un llamado a conformar una mesa multisectorial que reúna a todos los actores del ámbito de la salud privada.
El objetivo es abordar de forma global esta crisis, diseñar estrategias conjuntas y trabajar en soluciones concretas que permitan revertir la situación.
“El sistema no puede esperar más”, aseguran los médicos, que ven en esta crisis una oportunidad para transformar el presente antes de que el colapso sea irreversible.
FS