
El empresario Lázaro Báez deberá abandonar el arresto domiciliario que mantenía en su residencia de Santa Cruz y continuar cumpliendo su condena en una cárcel común.
Así lo ordenó este martes el Tribunal Oral Federal N.º 4, tras la confirmación de la sentencia por parte de la Corte Suprema de Justicia.
Los jueces Néstor Costabel, Ricardo Basílico y Fernando Canero dictaron la “inmediata detención y/o captura” de Báez y su alojamiento en una unidad penitenciaria dependiente del Servicio Penitenciario Federal.
Preferentemente en una institución próxima a su lugar de residencia, pero sin que se justifique una situación excepcional que amerite seguir bajo arresto domiciliario.
Báez, dueño de la empresa Austral Construcciones y figura central en el caso conocido como la "ruta del dinero K", había sido condenado a diez años de prisión por lavado de activos.
El pedido de detención fue impulsado por el fiscal Abel Córdoba luego de que la Corte Suprema dejara firme la condena. Según informaron fuentes judiciales, el empresario sería trasladado a un penal federal en Río Gallegos.
Hasta el momento, cumplía prisión domiciliaria en el marco de otra causa relacionada con la compra del campo uruguayo El Entrevero, también vinculada a maniobras de lavado.
En su resolución, los magistrados explicaron que la ley no garantiza automáticamente el beneficio de la prisión domiciliaria incluso cuando se invoquen causas como edad avanzada o estado de salud, sino que cada caso debe ser evaluado por el tribunal competente.
El cómputo judicial señala que Báez ya cumplió tres años, ocho meses y ocho días de prisión preventiva en esta causa, por lo que aún le restan seis años, tres meses y 22 días de pena efectiva.
A esto se suma que la Corte también dejó firme otra condena contra el empresario, a seis años de prisión, por su participación en la causa Vialidad, donde fue juzgado junto a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
FS