
Una joven fue asesinada de un balazo en la cabeza este miércoles por la noche mientras cargaba a su bebé de tres meses en el barrio Godoy, en la zona oeste de Rosario. El ataque ocurrió en plena calle, frente a su vivienda, sobre la cuadra de Julio Vanzo al 8100. La víctima murió en el acto y su hijo debió ser trasladado a un centro de salud tras sufrir golpes producto de la caída.
Según relataron testigos del hecho, la mujer estaba frente a su casa con su hija en brazos cuando un hombre en moto se acercó y abrió fuego sin mediar palabra. Uno de los disparos impactó directamente en su cabeza. La joven cayó al suelo junto a la bebé, que milagrosamente no fue alcanzada por las balas.
Personal del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (SIES) llegó a los pocos minutos y constató el fallecimiento de la víctima. La beba fue asistida por vecinos hasta que llegó una ambulancia, que la trasladó a un centro médico para evaluar su estado general. Presentaba golpes por la caída, pero se encontraba fuera de peligro.
El crimen ocurrió alrededor de las 20 horas, en una cuadra transitada, con varios comercios aún abiertos. “Fue todo muy rápido y brutal, la chica no tenía ninguna posibilidad de defenderse”, expresó un vecino conmovido por la escena. La llegada de efectivos policiales y de la Policía de Investigaciones (PDI) permitió iniciar las primeras diligencias, incluida la toma de testimonios y el relevamiento de cámaras de seguridad.
Hasta el momento no trascendieron la identidad de la víctima ni los posibles móviles del ataque. El caso quedó bajo la órbita del Ministerio Público de la Acusación (MPA), que ya trabaja en la identificación del autor del hecho.
El barrio Godoy ha sido escenario de otros episodios violentos. El pasado 14 de mayo, un hombre de 31 años fue baleado en la misma zona de Julio Vanzo al 8000. En aquella ocasión, la víctima recibió heridas en el brazo y la pierna, y fue derivada al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez.
Este nuevo crimen suma un capítulo más a la escalada de violencia que golpea a Rosario, donde los ataques armados en vía pública se han vuelto una alarmante constante.
LN