
La relación entre la titular del Senado y el presidente Javier Milei permanece rota y es por eso, que Villarruel comienza a planificar su posible refugio. Desde la provincia de Buenos Aires buscaría reposicionar su figura y estructurar una fuerza propia.
En ese sentido, en las últimas semanas, renovó su equipo en el Senado, donde nombró a Claudia Rucci como titular del Directorio del Observatorio de Derechos Humanos del Senado, puesto del cual había salido en diciembre.
La movida aparentemente sería para que Rucci cumpla una función de armadora con proyección a las elecciones de 2027, ya que lo más probable es que Karina Milei no le permita formar parte de las listas del oficialismo.
A su vez, Rucci asumiría la responsabilidad de elevar el nivel de las intervenciones públicas de Villarruel y construir una propuesta electoral que hasta el momento no logró consolidarse.
En las últimas semanas, la vicepresidenta centró su actividad en la provincia de Buenos Aires. Mantuvo encuentros con el jefe comunal de Chivilcoy, Guillermo Britos, y con su par de Saladillo, José Luis Salomón.
Los movimientos de Villarruel están bajo la supervisión de su principal asesor, Mario Russo, un antiguo referente liberal que se distanció del espacio en 2021 tras un conflicto con Milei. Tiempo después, regresó para colaborar nuevamente con ella.