
por Rodrigo Alegre
La jueza federal María Servini ordenó allanar el edificio Centinela de la Gendarmería Nacional en el marco de la investigación por el disparo contra el fotógrafo Pablo Grillo, de 35 años, durante las protestas de los jubilados del pasado 12 de marzo en los alrededores del Congreso. Pablo Grillo, que recibió el impacto de una cápsula de gas lacrimógeno, estuvo internado casi tres meses en el Hospital Ramos Mejía y fue intervenido quirúrgicamente en dos oportunidades.
La División Balística de la Policía de la Ciudad, a cargo del operativo dentro de la Gendarmería, secuestró "información administrativa" que la Gendarmería inició luego de los episodios violentos sucedidos en el Congreso. Además, secuestró 10 cartuchos idénticos utilizados ese mismo día y recibió la orden de confiscar la pistola lanzagases que utilizó el gendarme Héctor Guerrero, integrante del Departamento 6 de Gendarmería, a quien señala la investigación hasta ahora como el autor del disparo.
La jueza federal Servini había pedido en mayo pasado el legajo completo del cabo Héctor Jesús Guerrero y, al mismo tiempo, solicitó a las autoridades del Gobierno el envío del reglamento y el protocolo de uso de las pistolas lanza gases en manifestaciones.