
Danny Boyle, el director detrás del éxito de Quién quiere ser millonario, que se estrenó en 2009, expresó que, a pesar de su orgullo por la película, no la repetiría en el clima actual. Esta obra, que narra la historia de un joven de los barrios pobres de Mumbai que triunfa en un gameshow, le valió a Boyle ocho premios Oscar, incluido el de Mejor Director.
En una entrevista con The Guardian, Danny Boyle explicó que producir Quién quiere ser millonario en la actualidad sería un desafío, y no necesariamente por falta de talento o visión, sino por razones éticas y culturales. “No podríamos hacer eso ahora”, afirmó, añadiendo que “eso es como debería ser. Es hora de reflexionar sobre todo eso. Tenemos que mirar el equipaje cultural que llevamos y la marca que hemos dejado en el mundo”.
Boyle abordó directamente la acusación de colonialismo que algunos podrían atribuir a la película, respondiendo con una mezcla de defensa y autocrítica: “No, no… Bueno, solo en el sentido de que todo lo es. En ese momento se sentía radical. Decidimos que solo unos pocos de nosotros iríamos a Mumbai. Trabajaríamos con una gran tripulación india y trataríamos de hacer una película dentro de la cultura. Pero sigues siendo un extraño. Sigue siendo un método imperfecto”.
El director también sugirió que el tipo de apropiación cultural presente en Quién quiere ser millonario podría haber sido aceptable en su momento, pero no en la actualidad. “Ese tipo de apropiación cultural podría estar sancionado en ciertos momentos. Pero en otros tiempos no puede serlo. Quiero decir, estoy orgulloso de la película, pero ni siquiera contemplarías hacer algo así hoy. Ni siquiera se financiaría. Incluso si yo estuviera involucrado, buscaría a un joven cineasta indio para dirigirlo", declaró.