
Un operativo de rutina en la Ruta Nacional N° 34 derivó en un importante hallazgo de droga. Efectivos del Escuadrón 54 “Aguaray” de Gendarmería Nacional descubrieron dos tanques plásticos de agua adaptados para ocultar más de 40 kilos de pasta base de cocaína, ocultos en un camión con patente boliviana.
El procedimiento tuvo lugar sobre el kilómetro 1466 de la ruta, donde los efectivos detuvieron la marcha del camión. Durante la inspección, intervino el can antinarcóticos “Minos”, quien alertó sobre la posible presencia de drogas.
El perro se dirigió directamente a la parte baja del semirremolque y, tras olfatear intensamente, rasgó con sus patas uno de los tanques plásticos auxiliares, quedándose inmóvil junto a él. Ante esa marcación activa, y con la presencia de testigos, los gendarmes procedieron a retirar los recipientes y realizar cortes sobre su superficie.
Al abrir los tanques, se encontraron con una sustancia compacta de color amarillento. Al someterla al test de campo Narcotest, la reacción dio resultado positivo para pasta base de cocaína, con un peso total de 40 kilos.
La Fiscalía Federal de Tartagal tomó intervención en el caso, y ordenó el secuestro tanto de la droga como del vehículo. Además, dispuso la detención del conductor, un hombre de nacionalidad boliviana, que fue puesto a disposición de la Justicia.
El hallazgo se suma a una larga lista de operativos en la región norte del país, donde los métodos de ocultamiento de drogas en transporte internacional siguen presentando desafíos para las fuerzas de seguridad. En este caso, la intervención del perro detector fue clave para evitar que el cargamento saliera del país sin ser detectado.
LN