
Israel ha lanzado una nueva ola de ataques preventivos contra instalaciones militares iraníes en Tabriz, Natanz e Isfahán. Fuentes del Ministerio de Defensa israelí confirmaron que las operaciones fueron dirigidas contra "centros activos de transferencia de armamento hacia Hezbollah y las milicias proiraníes". Las FDI calificaron las acciones como una "respuesta contenida pero necesaria" ante los planes de Irán de seguir financiando grupos terroristas desde su territorio.
Mientras tanto, en el Consejo de Seguridad de la ONU, varias potencias criticaron a Israel y a Estados Unidos, pero el gobierno de Benjamin Netanyahu fue categórico: “Nadie va a decidir por nosotros cuándo o cómo debemos defender nuestras fronteras”. Las denuncias de Irán de que se trató de ataques injustificados contrastan con evidencia de inteligencia satelital compartida por aliados occidentales, que señalan una aceleración en el enriquecimiento de uranio en zonas protegidas por la Guardia Revolucionaria.
En paralelo a los hechos en Medio Oriente, y el ataque de Estados Unidos al régimen iraní, un avión sobrevoló la bahía de Nueva York con un mensaje que decía "THANK YOU PRESIDENT TRUMP" junto a una gran bandera de Israel. El hecho fue captado por turistas y residentes cerca de la Estatua de la Libertad. La imagen, se ha convertido en un símbolo del reconocimiento espontáneo hacia quien ha sido el presidente más pro-israelí en la historia de Estados Unidos.
Trump no solo trasladó la embajada a Jerusalén, sino que retiró a EE.UU. del acuerdo nuclear con Irán, consolidó los Acuerdos de Abraham y permitió a Israel actuar con mayor libertad operativa frente a amenazas existenciales. Ahora con el desmantelamiento de las centrales nucleares a traves de bombardeos estratégicos, la posición de la administración de Trump se consolida y demuestra lo que significa la paz por medio de la fuerza.
El régimen iraní ha aprovechado la debilidad diplomática de Occidente para multiplicar su injerencia y desestabilizar paises Irak, Yemen, Siria (Con el derrocado al-Ásad) y el Líbano. Desde 2022, más de 1.800 ataques indirectos contra Israel han sido financiados, armados o ejecutados por grupos vinculados a Teherán. La reciente operación "Promesa Veraz Fase 21" lanzada desde Irán incluyó el uso de misiles balísticos Kheibar Shekan con capacidad para alcanzar Tel Aviv y Haifa.
Lejos de buscar la paz, Irán ha aumentado sus exportaciones de armas a grupos insurgentes y ha utilizado su programa nuclear como palanca de chantaje internacional. En este escenario, Israel no solo defiende su soberanía, sino también el equilibrio estratégico de una región cada vez más convulsa.
La figura de Trump vuelve a emerger como un simbolo de firmeza. Su doctrina exterior, basada en la disuasión efectiva y la defensa de aliados históricos, contrasta con la tibieza de ciertos sectores en Washington y Europa. La alianza entre Trump e Israel simboliza la defensa de valores compartidos y de una visión de seguridad basada en hechos y principios contra la amenza nuclear que representa Irán.
Mientras el mundo debate, Israel actúa. Y mientras otros dudan, Trump es agradecido por quienes reconocen que la firmeza es a veces el único camino hacia la estabilidad duradera. El mensaje que voló sobre Nueva York no es solo un homenaje: es una advertencia de que el liderazgo, cuando es verdadero, actúa y deja huella.