La otra Nahir: comenzaron a juzgar a una joven que mató a su novio y podría recibir perpetua

Este lunes comenzó a ser juzgada Kiara Vilche, la joven que tenía 19 años cuando mató a su pareja, Federico Ocampo, de dos puñaladas en el pecho el 20 de julio de 2023, en el barrio Santa Lucía, en el límite entre Zárate y Campana.

El juicio comenzó esta mañana y está a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de Campana. La imputación que enfrenta la acusada es homicidio agravado por el vínculo, una figura que prevé prisión perpetua.

El juicio genera expectativa por sus similitudes con el caso de Nahir Galarza, condenada por el asesinato de su novio en 2017 en Gualeguaychú. Como en aquel caso, también aquí se juzga a una joven acusada de un crimen letal en el marco de una relación marcada por la violencia.

Federico, de 25 años, fue hallado gravemente herido en un zanjón y trasladado al Hospital San José, donde llegó sin vida. La autopsia reveló que una de las puñaladas perforó el corazón. En un principio, se pensó que se trataba de un intento de robo, pero pronto las pruebas apuntaron hacia su pareja.

Según testigos, esa tarde ambos habían discutido y Kiara se dirigió hasta el lugar donde él estaba reunido con amigos, le pidió las llaves de la moto y luego lo atacó. Las pertenencias de Federico quedaron en el lugar, lo que descartó el móvil del robo.

Una testigo clave la señaló directamente, y en su vivienda la Policía encontró manchas de sangre. La acusación sostiene que la relación entre ambos estaba atravesada por situaciones de violencia, tal como lo relató Mariana Ocampo, hermana de la víctima: “Ella varias veces lo roció con nafta. En otra pelea le fisuró una costilla con un adoquín”.

A pesar de estos episodios, Federico nunca la denunció. “Le daba vergüenza”, dijo su familia. La pareja convivía con una hija de dos años, que ahora está al cuidado de la abuela materna. A lo largo de tres años, la relación fue intermitente y marcada por idas y vueltas, como el caso de Galarza y Pastorizzo. “Ella no se iba. Se quedaba afuera de la casa hasta que él le abría”, contó Mariana.

La joven acusada estuvo ocho meses detenida, pero luego accedió al beneficio de la prisión domiciliaria por ser madre de una menor. No obstante, desde este lunes enfrenta el juicio en libertad condicional, en audiencias que se extenderán hasta el 26 de junio.

La defensa de Kiara adelantó que presentará una estrategia basada en la supuesta violencia de género sufrida por la imputada, y argumentará que actuó en el marco de una agresión. Según Mariana, esa versión no se sostiene: “Ella decía que él era violento, pero mi hermano era quien recibía los golpes, tenía moretones, fracturas. Nunca quiso denunciar por vergüenza”.

El día del crimen, ambos habían trabajado juntos en un puesto de comida. Más tarde, según reconstruyó la investigación, se produjo una nueva pelea. “Le pidió las llaves, él se las dio, y después lo apuñaló”, explicó Mariana, quien también fue quien llevó a Federico al hospital creyendo que aún estaba con vida. “Ella vino con nosotros. Yo la abracé. No se le cayó una lágrima”, recordó.

La fiscalía considera que la agresión fue deliberada y que la conducta de Vilche se encuadra plenamente en la figura de homicidio agravado. La defensa, en cambio, intentará demostrar que Kiara actuó bajo presión psicológica y en un contexto de violencia previa.

LN