29/06/2025 - Edición Nº873

Política

Presión en el Senado

Villarruel, acorralada: presión para sesionar mientras teme el debate por jubilados

24/06/2025 | La titular del Senado enfrenta el dilema entre activar la Cámara y evitar un choque con el oficialismo y la oposición.



La vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, atraviesa una situación de creciente presión interna. Un grupo de senadores aliados a La Libertad Avanza (LLA) le reclama que convoque a sesiones para avanzar en una agenda legislativa que, hasta ahora, permanece paralizada.

El problema es que Villarruel teme que esa convocatoria permita al peronismo introducir y tratar proyectos sensibles, como los aumentos a jubilados y la emergencia en discapacidad, que cuentan con media sanción en Diputados y son prioridad para el bloque mayoritario.

La Cámara alta acumula meses de inactividad, generando críticas tanto desde el oficialismo como desde la oposición. Algunos señalan a la falta de voluntad política para impulsar sesiones, mientras otros destacan que la conformación incompleta de comisiones también entorpece el trabajo parlamentario.

El bloque Provincias Unidas, liderado por Carlos “Camau” Espínola, formalizó el pedido de sesión el pasado 17 de junio. En la solicitud, firmada por senadores como Edith Terenzi y Lucila Crexell, se incluye un paquete de 39 proyectos que abarcan desde modificaciones al Código Penal hasta leyes de salud y ambiente.

Entre los proyectos destacados figuran la Ley de Parto Humanizado, la actualización del Sistema de Alerta Rápida Sofía, y la incorporación de la atrofia muscular espinal al régimen de detección temprana de patologías, temas que ya cuentan con dictamen favorable.

La sesión requerida podría concretarse el miércoles 25 de junio, lo que implicaría que, apenas un día después, el jefe de Gabinete Guillermo Francos presente su informe de gestión ante el Senado, tal como está previsto para el jueves 26.

Sin embargo, la convocatoria podría desatar un nuevo conflicto, ya que el peronismo busca utilizar ese espacio para tratar sobre tablas los proyectos de aumento a jubilados. Este tema, impulsado por el bloque que conduce José Mayans y Anabel Fernández Sagasti, es un pedido expreso de Cristina Kirchner.

La incertidumbre radica en que el oficialismo no tiene aún asegurado los dos tercios necesarios para aprobar el tratamiento sobre tablas. Un rechazo en esta instancia haría perder estado parlamentario a los proyectos, un riesgo que genera cautela entre los dirigentes.

Durante este año, el Senado solo registró tres sesiones ordinarias: un homenaje al Papa Francisco tras su fallecimiento, y dos en las que el oficialismo sufrió derrotas, como el rechazo a pliegos judiciales y la aprobación del proyecto de “Ficha Limpia”.

En paralelo, Villarruel enfrenta críticas internas por la suba salarial otorgada a empleados legislativos y la discusión sobre las dietas de los senadores, que actualmente rondan los 9,5 millones de pesos en bruto. Para evitar polémicas, pidió a cada senador que confirme si acepta un aumento del 3,9%.

Además, la vicepresidenta tuvo cambios en su equipo de asesores en el último mes, reemplazando a varios por un exmilitar y un exasesor cercano a La Libertad Avanza, lo que refleja su intención de reforzar su entorno político en medio de la crisis parlamentaria.