26/06/2025 - Edición Nº870

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Agroindustria

Deforestación: “El primero de enero es pasado mañana”, sostuvo Gustavo Idígoras

24/06/2025 | Industriales y acopiadores criticaron uno de los pedidos europeos en materia de deforestación para 2026: la segregación física de granos



En un evento organizado por el Instituto de Capacitación Agropecuaria (INCAGRO), autoridades europeas presentaron el Reglamento de la Unión Europea (UE) sobre producción agropecuaria libre de deforestación. Como se recordará, ese bloque aprobó en 2023 la Resolución 1115/2023, que establece una serie de regulaciones para el ingreso de un listado de productos, entre ellos soja y derivados, carne vacuna y forestales. 

En el evento participaron Viki Lövenberg, jefa de la Sección Económica y Comercial de la Delegación de la Unión Europea en Argentina; Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (CIARA-CEC) y Fernando Rivara, presidente de la Federación de Acopiadores. 

La representante europea explicó los motivos que llevaron a presentar esta legislación, remarcó que representa una oportunidad para Argentina y recordó cuáles son los requisitos que la agroindustria deberá cumplir a partir de 2026, para poder ingresar al bloque UE. 

Por su parte, tanto industria como acopio coincidieron en dos cuestiones: el reglamento se pondrá en marcha a partir de 2026 y criticaron una de las demandas europeas, que es la segregación física de los granos de soja que se exportarán al Viejo Continente.

La postura europea

“Somos muy conscientes de las preguntas que este reglamento despierta en Argentina”, expresó Lövenberg. En este punto, intentó acercar posiciones y expresó que la Resolución 1115/2023 “es una oportunidad para Argentina de proveer una demandas de productos mas responsables con el medio ambiente”. 

La representante europea repasó las razones que llevaron a redactar esta normativa y se apoyó en estadísticas de la FAO.

“Entre 1990 y 2020 se perdieron un total de 420 millones de hectáreas de bosques y el Parlamento europeo buscó una propuesta legislativa para frenar la deforestación ”, sostuvo.

“El 1° de enero es pasado mañana”

A su turno, Idígoras reconoció que la normativa europea es un “reglamento que ha generado un impacto global de naturaleza impredecible para muchos países del mundo, pero hoy ya estamos en una etapa nueva, una fase de implementación”.

El directivo reconoció que “el primero de enero es pasado mañana (en referencia al 1° de enero de 2026, fecha de entrada en vigencia de la normativa),  falta muy poco tiempo para llegar. Todos los países del mundo se están preparando, ya no hay un solo país en el mundo que no se esté preparando”.

En este punto, señaló que “no hay un solo país en el mundo que tenga una estrategia únicamente de negociación política, todo saben que necesitan estrategias comerciales”.

Críticas a la segregación física de granos

Entre otros puntos, la normativa europea exige cumplir con la segregación física de granos en origen. Pasando en limpio, los exportadores argentinos deberán garantizar que no se mezclen los granos que acreditan la condición de libre deforestación con productos de origen desconocido o deforestados.

Este es uno de los aspectos que mayor resistencia genera en la agroindustria argentina. “Hay muchos temas dolorosos, pero quiero hacer especial hincapié en uno de ellos, que es el de mayor dificultad en términos prácticos y el de mayor esfuerzo económico y que a su vez tiene cierta irracionalidad de suplementación que es el concepto de segregación física”, advirtió el directivo.

Idigoras recordó que se trata de un “tema que hemos discutido muchísimas veces con la Comisión Europea, con los estados miembros europeos y hasta con los parlamentarios europeos. Algunos de ellos nos dieron la razón y de hecho hubo algún borrador el año pasado que no prosperó en el en el parlamento”. 

Pese a esta circunstancia, admitió que se trata de un “tema indefectible de cumplimiento obligatorio y por eso trabajamos tanto con las cooperativas como con los acopiadores, para buscar las las prácticas más fáciles de implementar”. Y concluyó: “Hasta tanto no se logre modificar dicho reglamento es indispensable que cumplamos con la segregación física”. 

“Una pretensión ridícula”

Por su parte, el presidente de los acopiadores tampoco ahorró críticas para esta exigencia europea. “Reiteramos porque lo podemos fundamentar en cualquier mesa de debate técnico. La segregación física del poroto no tiene sentido, no tiene argumentación técnica y lo que es peor, no asegura nada”.

Rivara expresó que “la pretensión de segregar poroto de soja de otros exactamente iguales es tan ridícula como pretender que los bancos separen los billetes según el barrio donde vive cada depositante”.