
Un total de once clubes de Argentina, de la Liga Profesional de Fútbol y del ascenso, se encuentran actualmente inhibidos por la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) en el actual mercado de transferencias. Este tipo de sanciones les impide a los clubes incorporar nuevos jugadores hasta que cumplan sus obligaciones financieras con sus acreedores.
En la Primera División, se encuentran afectados San Lorenzo de Almagro, Independiente de Avellaneda, Gimnasia y Esgrima La Plata, Central Córdoba de Santiago del Estero, Banfield y Atlético Tucumán.
Por otro lado, clubes del ascenso como Villa Dálmine, Sol de Mayo de Viedma, Deportivo Armenio, Quilmes y Brown de Adrogué, se encuentran en la misma situación.
En este registro de la máxima entidad del fútbol, se incluyen los que tienen prohibido temporalmente registrar nuevos jugadores debido a diversas infracciones, como disputas financieras o incumplimientos regulatorios.
El nombre oficial es "Lista de Prohibiciones de Registro de la FIFA" y se creó con el objetivo de garantizar la transparencia y el cumplimiento normativo en el deporte, permitiendo a las partes interesadas mantenerse informadas sobre qué clubes no pueden fichar nuevos jugadores durante el período de prohibición.