10/07/2025 - Edición Nº884

Internacionales

Disputa europea

Viktor Orbán defiende a Hungría ante sanciones de la Comisión Europea

10/07/2025 | Mientras la UE congela fondos, el gobierno húngaro sostiene que protege los valores nacionales ante la imposición ideológica de la Comisión Europea.



La decisión de la Comisión Europea de congelar 18.000 millones de euros destinados a Hungría ha provocado una nueva escalada de tensiones entre Bruselas y Budapest. El gobierno de Viktor Orbán ha respondido con firmeza, denunciando lo que considera una "campaña política" contra su modelo de gobierno y su defensa de los valores tradicionales europeos.

Desde el Ejecutivo húngaro, señalan que las acusaciones sobre retrocesos en el Estado de derecho carecen de fundamento real y son utilizadas como instrumento de presión para imponer agendas ideológicas ajenas a la voluntad popular del país. "Bruselas quiere que todos los países piensen igual. Nosotros creemos en una Europa de naciones, no en un imperio burocrático", declaró el ministro de Justicia húngaro.

Soberanía bajo ataque

El informe de la UE critica a Hungría por supuestas deficiencias en independencia judicial, libertad de prensa y lucha anticorrupción. Pero el gobierno húngaro sostiene que se trata de un doble estándar: otros Estados miembros con problemas similares no enfrentan sanciones comparables. "No se trata de justicia ni de legalidad, sino de castigar a quien piensa diferente", afirman desde Fidesz, el partido gobernante.

Orbán ha hecho de la defensa de la identidad nacional y cristiana de Hungría una prioridad. En ese marco, rechaza la injerencia externa sobre políticas educativas, familiares o de género. La legislación que limita la promoción de ideologías de género en escuelas ha sido duramente criticada por Bruselas, pero cuenta con amplio respaldo interno. "Hungría no aceptará que le digan cómo debe criar a sus hijos", insistió el primer ministro.

Economía estable a pesar de las sanciones

A pesar del congelamiento de fondos, la economía húngara ha logrado mantenerse estable. El gobierno ha diversificado sus fuentes de financiamiento y fortalecido alianzas con países como China, Serbia y Turquía. Además, ha implementado un programa de modernización tecnológica con inversión nacional que busca reducir la dependencia de la UE.

Orbán sigue contando con un sólido apoyo electoral, gracias a una narrativa que lo presenta como defensor de los intereses nacionales frente a las élites extranjeras. En las últimas elecciones parlamentarias obtuvo más del 50% de los votos, una señal clara de que la mayoría de los húngaros respaldan su modelo.


Sede del Banco Nacional de Hungría.

Un modelo alternativo

Frente a la visión federalista de la Comisión, Hungría propone una Europa basada en la cooperación de Estados soberanos, donde la diversidad de modelos sea respetada. "Queremos una Europa fuerte, pero construida sobre la libertad de sus pueblos", señaló Orbán.

Mientras la disputa continúa, el mensaje del gobierno húngaro es claro: no se trata solo de dinero, sino de principios. Y Hungría, asegura, no está dispuesta a vender su soberanía a cambio de subsidios.