
En enero de 2025, la decisión del Gobierno nacional de implementar la baja temporal en los derechos de exportación para granos y subproductos cambió por completo el mapa de la comercialización granaria en Argentina.
En el caso de los cultivos con mayor peso en la balanza comercial -soja y maíz- las retenciones bajaron de 33% a 26% y de 12% a 9,5%, respectivamente. La fecha que todos los productores y la industria anotaron en rojo en el almanaque fue el 30 de junio, cuando expiraba este beneficio.
Y aunque este beneficio se extendió para trigo y cebada, que seguirán tributando 9,5% hasta marzo de 2026, el resto de los cultivos regresó a sus niveles habituales. Ante la proximidad del 30 de junio, las ventas del campo se dispararon y según el consultor y ex subsecretario de Mercados Agropecuarios, Javier Preciado Patiño, tanto la venta primaria de soja como las Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE) que se registraron el pasado mes de junio “estuvieron muy por encima de lo normal”.
La registración de nuevas exportaciones del complejo #soja prácticamente desapareció despues del 1 de julio, cuando finalizó la baja de #retenciones. ¿Era esperable esto? Veamos. 🧵 pic.twitter.com/sgOtqLH7wR
— Javier Preciado Patiño (@jpreciadopatino) July 11, 2025
En concreto, durante ese mes los productores vendieron 10,1 millones de toneladas, versus 3,9 millones de junio 2024. “La registración de nuevas exportaciones del complejo soja prácticamente desapareció después del 1° de julio, cuando finalizó la baja de retenciones”, agregó.
En el caso de las DJVE de poroto, aceite y harina de soja, en junio de este este año se anotaron 13,3 millones de toneladas. En el mismo lapso de 2024, los registros acumularon 2 millones de toneladas.
“Así, el programa de embarques de esta campaña 2024/25 al mes de septiembre alcanza el promedio de los últimos siete años y queda solo un poco por debajo de la 2023/24, que fue una muy buena campaña”, consideró Preciado Patiño.
El consultor tomó el caso puntual de la harina de soja, el producto “estrella” del complejo agroexportador, tanto por volumen de envíos y divisas que genera. Entre abril 2024 y septiembre 2025, las DJVE sumaron 14,1 millones de toneladas. El promedio para ese período se ubica en 13,9 millones de toneladas, mientras que en 2023/24 llegó a 15.5 millones
En el caso de las ventas de harina y aceite de soja, Preciado Patiño estimó que el repunte en el registro de DJVE se tendría que ver para octubre en adelante, a menos que una gran demanda externa traccione más exportaciones ya”. Y agregó: “Pero en función del promedio y la campaña 2023/24, hasta setiembre estamos cubiertos”.
Con respecto a la venta de poroto por parte de la industria, señaló que “el precio de la soja resiste en estos días de julio bastante bien a la suba de retenciones, en pesos, ya que en dólares cae. Eso hizo que todavía veamos ventas primarias en torno a las 90.000 toneladas diarias”.