12/07/2025 - Edición Nº886

Internacionales

Arte colonial

Djidji Ayôkwé: el tambor que vuelve a casa tras un siglo en Francia

11/07/2025 | El tambor Djidji Ayôkwé, saqueado en 1916 por tropas coloniales, regresa a Abiyán en un gesto que renueva el debate sobre el arte expoliado.



El tambor sagrado Djidji Ayôkwé, incautado por las tropas coloniales francesas en 1916, será finalmente devuelto a Costa de Marfil tras más de un siglo en manos de museos franceses. La Asamblea Nacional de Francia aprobó por unanimidad la restitución de esta pieza emblemática que pertenece al pueblo Ebrié y que estuvo durante décadas en el Museo Quai Branly, en París.

Con más de tres metros de largo y un peso superior a los 400 kilos, este "tambor parlante" tenía un rol central en la comunicación y la organización comunitaria. Su valor no es solo artístico: se trata de un objeto de profundo significado ritual y cultural, un verdadero símbolo de identidad para las comunidades del sur de Costa de Marfil.

El largo camino de vuelta

La restitución fue posible gracias a un proyecto de ley ad hoc, ya que el patrimonio nacional en Francia se considera inalienable. Este tambor, como otras miles de piezas africanas, fue trasladado a museos franceses durante el período colonial, y su repatriación requiere una decisión política. En este caso, la petición formal de Costa de Marfil data de 2018 y fue respaldada por el presidente Emmanuel Macron en 2021.

La votación en el Senado ya había sido aprobada en abril, pero el voto final en la Asamblea Nacional, realizado en julio de 2025, fue un gesto rotundo: todos los partidos apoyaron la devolución. En palabras del Ministerio de Cultura, "es un acto de justicia histórica y de reparación simbólica".

Un gesto en clave regional

Este movimiento forma parte de un proceso más amplio. En 2021, Francia restituyó a Benín 26 piezas del tesoro real de Abomey, y en 2025 Países Bajos y Alemania han hecho lo propio con los bronces de Benín y otros artefactos. Sin embargo, las cifras siguen siendo modestas: solo 27 objetos africanos han sido restituidos por Francia pese a tener más de 90 mil en sus colecciones.

El tambor Djidji Ayôkwé, restaurado en 2022, representa ahora una excepción notable. Su devolución responde no solo a la presión diplomática, sino también a una creciente sensibilidad social sobre el pasado colonial y su legado material en museos europeos.

Memoria, justicia y diplomacia

Para el gobierno marfileño, la llegada del tambor es un acontecimiento de alto impacto. Está prevista una ceremonia oficial en Abiyán, con presencia de líderes tradicionales Ebrié y funcionarios estatales. Voceros del Ministerio de Cultura destacaron que "no se trata solo de arte, sino de devolver dignidad".

Los debates continúan en Europa sobre cuánto arte africano debería regresar. El informe Sarr-Savoy (2018) ya había estimado que hasta el 90% del patrimonio africano está fuera del continente. A pesar de la reticencia de algunos sectores museísticos, el consenso político parece avanzar.

En nombre de la cultura

La devolución del Djidji Ayôkwé marca un precedente concreto en la reparación del expolio colonial. Más allá del simbolismo, expresa una nueva disposición de los Estados europeos a revisar su pasado y transformar sus prácticas museísticas. La probabilidad de que estos gestos se multipliquen en el corto plazo es alta, especialmente en países que han abierto canales diplomáticos con sus excolonias.

Sin embargo, el proceso sigue siendo desigual y dependiente de decisiones estatales unilaterales. Si bien la devolución del tambor representa un acto de justicia, el verdadero desafío radica en construir mecanismos institucionales que permitan una restitución sostenida, transparente y colaborativa con los países africanos.