
El chocolate con pistacho se ha convertido en la obsesión gourmet del momento, pero su popularidad explosiva generó una inesperada crisis de abastecimiento que hoy golpea a la industria alimenticia mundial. En Argentina, el impacto es directo: tras el lanzamiento de sus versiones del "chocolate Dubái", firmas como Havanna y Lucciano’s agotaron stock en cuestión de horas y ahora luchan por conseguir la materia prima. El precio del pistacho, en tanto, se disparó más de un 50% en solo un año.
El fenómeno comenzó a fines de 2023, cuando una chocolatería de Dubái lanzó una barra que combinaba chocolate, crema de pistacho y masa kataifi. El producto se volvió viral en TikTok, acumulando más de 120 millones de visualizaciones y motivando a gigantes internacionales como Lindt, Läderach, Lidl y Real Dubai Chocolate a subirse a la ola.
En el mercado local, la respuesta fue inmediata. Havanna lanzó alfajores rellenos de pistacho y Lucciano’s sumó helados y conitos con este ingrediente. El éxito fue rotundo: en algunas provincias, los productos se agotaron el mismo día de su lanzamiento. Pero este furor trajo un problema logístico: no hay pistacho suficiente para cubrir la altísima demanda.
Según datos del sector, el kilo de pistacho se encareció más de 50% en apenas un año, llegando a pagarse hasta U$S 150 en Argentina. En los mercados internacionales, la libra subió de U$S 7,65 a U$S 10,30. Esta escalada no se debe solo a la tendencia del chocolate; también influyó una mala cosecha en Estados Unidos y la decisión de Irán -el segundo productor mundial- de concentrar sus exportaciones en los Emiratos Árabes Unidos.
Para evitar paralizar sus líneas de producción, muchas empresas locales tuvieron que salir a buscar pistacho en regiones productoras como San Juan y La Rioja, o recurrir a importaciones con precios aún más elevados. La escasez golpea especialmente a las industrias medianas y artesanales, que no pueden competir con las grandes marcas por los volúmenes disponibles del preciado fruto seco.
El llamado "chocolate Dubái" trascendió las redes sociales y se consolidó como una categoría de altísima demanda. Hoy, los productos con pistacho ocupan un lugar privilegiado en supermercados y confiterías, desde bombones exclusivos hasta helados artesanales. Incluso grandes cadenas internacionales admiten que esta explosión de la demanda los tomó por sorpresa.