26/07/2025 - Edición Nº900

Sociedad


Fue agredida por hinchas colombianos

Una joven china viaja por Argentina en busca de "su héroe" de la Copa América

24/07/2025 | Ailing Hou, una fanática de Lionel Messi, recorre estadios y sedes de fútbol en Argentina con un solo objetivo: encontrar al joven que la defendió de un ataque racista de hinchas colombianos en la final de la Copa América 2024.



Desde hace un año, la vida de Ailing Hou, una ciudadana china de 24 años, se transformó en una búsqueda incansable. Esta joven de Beijing, profesora de inglés, está recorriendo canchas y sedes de fútbol en Argentina con una misión muy particular: encontrar a un joven argentino que salió en su defensa durante un incidente con hinchas colombianos en la final de la Copa América 2024, disputada en Miami.

Ailing cuenta que su pasión por el fútbol y, en particular, por la Selección Argentina, nació en el Mundial de Sudáfrica 2010, cuando Lionel Messi la cautivó a sus nueve años. "Ahí empecé a sentirme un poquito argentina. Me encantaba ver a Messi en Barcelona y en la Selección. Mi amor por el fútbol, gracias a Lionel, creció de una manera que ni yo me imaginé", relató a Clarín.

Su devoción la llevó a seguir al equipo albiceleste, incluso viajando a Miami en 2024 para la final de la Copa América contra Colombia. Sin embargo, lo que prometía ser una fiesta se convirtió en una experiencia desagradable. "En aquel partido fui agredida por un grupo de hinchas colombianos. Me insultaron, se burlaron, haciendo gestos estirándose sus ojos y querían sacarnos nuestros asientos, que habíamos comprado con mi amiga", detalló.

Ailing y su amiga pensaron en retirarse del Hard Rock Stadium, pero el acoso persistió. Fue entonces cuando apareció un "chico argentino que se paró frente a ellos para defendernos". Su actitud, según Ailing, fue "muy valiente" al intervenir para proteger a dos desconocidas. "El chico primero les gritó y después, en un tono más amistoso, logró que se fueran. Él estaba ubicado cerca de nosotras y se quedó allí todo el tiempo. Su gesto fue conmovedor", expresó la joven china.

En medio de la euforia por el triunfo argentino, Ailing solo pudo agradecerle con una sonrisa y un intento fallido de comunicarse, ya que él no hablaba inglés y ella "ni una palabra de español". Solo pudo tomarle algunas fotos para no olvidar su rostro. "Estaba convencida que después iba a poder saber algo de él, su nombre y dónde vive. Pero nada. A más de un año siento una gran frustración, porque ésta es la segunda vez que vengo a la Argentina", confiesa.

Su primera visita a Argentina fue a fines de marzo, con la esperanza de encontrarlo en el partido de Eliminatorias contra Brasil. Intentó contactar a periodistas para que publicaran su foto, pero no obtuvo respuesta, lo que la dejó "decepcionada". Durante quince días, visitó las sedes de River, Boca y Vélez, mostrando la foto y explicando su motivo a través de un amigo traductor. "La gente de la recepción de cada club me recibía con amabilidad, miraba la foto, pero nada, no quería darme por vencida", recordó.

Ahora, en su segunda visita al país, Ailing no se rinde y planea viajar al interior para continuar su búsqueda, aunque también aceptó el consejo de amigos de disfrutar la oportunidad de conocer otras ciudades.

Hace unos días, su misión la llevó a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), donde dejó una foto y una emotiva carta. "Soy de china, fanática del fútbol argentino. En julio del año pasado, en la final de la Copa América, un argentino muy valiente nos ayudó a mí y a una amiga de un grupo de colombianos que nos estaban discriminando. Estoy buscando a este chico, a quien no le pudimos agradecer como se debe. Pero no porque somos antipáticos, sino porque no podíamos expresarnos. No quisiera que tenga esa impresión de las personas chinas. Ojalá la AFA pueda ayudarme", decía parte de la misiva, aunque lamenta: "No tuve ninguna devolución".

Al ser consultada sobre qué haría si lo encuentra, Ailing tiene planes muy concretos. "Primero tengo unas palabras preparadas que me memoricé que son sólo para él. Después me gustaría invitarlo diez días a conocer China. Yo me haría cargo del viaje y la estadía. Sería un sueño para mí y de alguna manera siento que ya no estaría más en deuda". Aclara, para evitar malentendidos culturales: "En mi cultura, esto no significa que yo esté enamorada o quiera tener un vínculo con él, sólo me gustaría ser su amiga".