
El cuerpo sin vida de Eduardo Rubén Fuentes, un hombre de 32 años que estaba desaparecido desde hacía un mes, fue hallado enterrado en una zona rural de Cinco Saltos, provincia de Río Negro. El hallazgo se produjo cerca del lago Pellegrini, en un campo que había sido rastrillado anteriormente por las autoridades.
El operativo, que culminó con el descubrimiento del cuerpo a casi dos metros de profundidad, fue realizado por la División Canes, la Brigada Rural, efectivos de la Brigada de Investigaciones de Cinco Saltos y peritos de Criminalística. La búsqueda se reactivó luego de obtener información clave que condujo a los agentes hasta un terreno perteneciente a un hombre de 64 años, quien quedó detenido e imputado como presunto autor del asesinato.
El caso despertó una fuerte conmoción en la comunidad local, especialmente por el tiempo transcurrido desde la desaparición de Fuentes y el modo en que fue encontrado. El hombre había sido reportado como desaparecido por su familia, y la Policía había difundido un afiche con sus características físicas y la ropa que vestía al momento de su desaparición: gorro de lana naranja, campera celeste de neopreno, pantalón de buzo negro y zapatillas deportivas oscuras.
Según el parte oficial, Fuentes tenía una contextura robusta, medía 1,65 metros, tenía ojos marrones, cabello negro corto y lacio, y cuatro tatuajes visibles. La investigación está en manos del fiscal Leandro López, quien dirige las actuaciones y coordina la recolección de pruebas en el lugar.
Aunque aún no se conocen públicamente los detalles del vínculo entre la víctima y el sospechoso, ni las circunstancias del crimen, la causa se investiga como un homicidio.