
Se trata de una alianza que busca interpretar el malestar provincial frente a la gestión nacional de Javier Milei y ofrecer una alternativa electoral a las grandes coaliciones vigentes.
La cumbre de gobernadores opositores que se realizó este miércoles en la Casa de Chubut en Buenos Aires cerró con la primera novedad política del año electoral.
Si bien el correntino Gustavo Valdés no participó del encuentro, manifestó su vocación de confluir en la estrategia que tuvo como testigo presencial al jefe de Hacemos, el exgobernador cordobesista Juan Schiaretti.
El nuevo bloque promete una agenda enfocada en el desarrollo productivo, el fortalecimiento del federalismo y la defensa de los recursos locales, en contraposición a la centralización del Ejecutivo central.
Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Martín Llaryora (Córdoba) lideran la representación en provincias clave del centro del país, donde detentan un amplio caudal electoral.
Carlos Sadir (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes) suman la voz del norte argentino con fuerte base territorial en la región del NOA y Mesopotamia.
En tanto que Ignacio Torres (Chubut) y Claudio Vidal (Santa Cruz) completan el bloque con presencia en la Patagonia y experiencia en disputas interprovinciales por fondos y recursos.
Según trascendió, la conformación del frente no implicará una ruptura con otras estructuras opositora‑provinciales, y abre la puerta a alianzas entre sectores como el PRO, radicales disidentes y gobernadores afectados por los recortes de coparticipación.
𝐔𝐍 𝐆𝐑𝐈𝐓𝐎 𝐅𝐄𝐃𝐄𝐑𝐀𝐋
— Maximiliano Pullaro (@maxipullaro) July 30, 2025
Hay un grito federal que necesita voces en el Congreso. Como gobernadores, tenemos la enorme responsabilidad de defender los intereses de nuestras provincias y, al mismo tiempo, contribuir a la gobernabilidad de la Argentina.
Todos, el gobierno… pic.twitter.com/GEwKKzAign
Reformular el pacto fiscal: ante la caída de los ingresos por coparticipación y el freno a la obra pública, demandan mayor presupuesto para provincias y mayor autonomía en la gestión.
Proyectar una alternativa federal que trascienda las etiquetas partidarias nacionales tradicionales y dé voz institucional al reclamo territorial organizado en torno a servicios e infraestructura.
Fortalecer un posicionamiento político propio con vistas a las elecciones legislativas del 26 de octubre, basado en gobernadores que gestionan y quieren proyectarse como opción moderada y territorial frente a las demandas locales.
El armado se da en un momento político en el que los gobernadores buscan fortalecer su posición frente al Ejecutivo nacional, sin confrontar directamente, aunque con señales claras de autonomía.
En reuniones previas, evitaron convertirse en una cumbre anti‑Milei, aunque claramente expresan disconformidad con algunas decisiones económicas -especialmente en recortes de fondos y coparticipación-.
Las alianzas ya existentes -como el Pacto de Mayo firmado por 18 mandatarios en 2024- marcan precedentes en la coordinación interprovincial, aunque sin un horizonte electoral definido. Este nuevo frente marca un salto hacia la concertación política electoral, con aspiraciones concretas ya de cara a octubre, cuando cada cual en sus respectivas provincias competirá contra La Libertad Avanza.