
En su nuevo informe sobre generación de empleo en la agroindustria, la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) lo presentó en base a una premisa bien futbolera.
Con la excusa del reciente Mundial de Clubes de Fútbol, que se llevó a cabo en Estados Unidos entre el 15 de junio y el 13 de julio, la entidad comparó a los distintos sectores que componen la agroindustria local con el desempeño de los equipos que participaron en el certamen.
Como muestra, los 4,2 millones de puestos que se reparten en todos los eslabones -y sostienen el 22% del empleo argentino- permitirían colmar 51 estadios Metlife, en donde se disputó la final del torneo, en donde el Chelsea de Inglaterra -el equipo en donde juega Enzo Fernández- se impuso al PSG francés.
“La carne vacuna es el Chelsea del empleo, se lleva la copa del campeón con más de 500.000 trabajadores. Las frutas y verduras son el PSG, se llevan el título de subcampeón con más de 450.000 puestos de trabajo”, explicó Nicolle Pisani Claro, economista jefa FADA.
Si bien en el mencionado Mundial de clubes no se disputó el partido por la medalla de bronce, también estimaron quien ocupa el tercer puesto en generación de trabajo. Ese escalón del podio fue para el trigo, que con 400.000 empleos tendría que haber disputado ese hipotético partido, que debería haber sido entre el Real Madrid y Fluminense.
La cadena del vino también juega su partido: con 146.000 puestos de trabajo, permitiría formar más de 13.000 equipos de fútbol.
Siguiendo el paralelismo con el Mundial de Clubes, los puestos de trabajo de las cadenas de granos son un gran aporte al empleo nacional: más de 1 millón de trabajadores, que permitirán llenar 32 estadios del Chelsea. En tanto, los empleados de las carnes vacuna, aviar y porcina llegan a 800.000 personas, el equivalente a 16 estadios del PSG.
De acuerdo al trabajo de FADA, las cadenas agroindustriales generaron 2,1% más de trabajo comparado a la edición anterior. De este modo, las cinco cadenas que más crecieron fueron girasol, tabaco, frutas y verduras, láctea y maquinarias.
Los 4,2 millones de puestos relevados por la entidad se distribuyen de la siguiente manera: 33% en producción, 27% el comercio, 22% la industria, 9% en servicios conexos, 5% en transporte y logística y 4% en insumos y maquinaria agrícola.
Tal como reveló el informe, las cadenas agroindustriales son una fuente de trabajo para más de 4 millones de personas y se caracterizan por estar presentes a lo largo y ancho del país:,
A modo de ejemplo, esto incluye desde la producción de lana y ovinos en la Patagonia, los vinos en Cuyo, el maíz en la región Pampeana, la caña de azúcar en el NOA o la yerba mate en el NEA.
“Es por esto que es necesario, más que nunca, que haya políticas públicas estables en el tiempo que generen crecimiento y desarrollo en todas las regiones. Políticas que logren dinamizar la cantidad y calidad del empleo, que repercuta en la calidad de vida de la población y en la salud económica de nuestro país”, concluyeron.