
La actriz Kelley Mack, cuyo trabajo más conocido fue en The Walking Dead, falleció a los 33 años en Cincinnati. Según informó su familia, su deceso se produjo debido a un glioma, un tipo de tumor cerebral.
Mack, quien interpretó a Addy en la novena temporada de la popular serie de AMC, participó en cinco episodios entre 2018 y 2019. Fue parte del arco narrativo de los Susurradores.
Nacida el 10 de julio de 1992 en Cincinnati, Ohio, bajo el nombre de Kelley Lynne Klebenow, comenzó su carrera desde muy joven actuando en comerciales. Su debut en el cine llegó con el cortometraje The Elephant Garden en 2008, por el cual recibió un premio de actuación en la Tisch School of the Arts. Este proyecto, que también fue reconocido en el Festival de Cine de Tribeca, marcó el inicio de una trayectoria que la llevó a trabajar en diversos proyectos en Los Ángeles, donde residió los últimos 11 años de su vida.
Además de The Walking Dead, Mack acumuló créditos en series como 9-1-1, Chicago Med y Schooled, así como en películas como Mr. Manhattan. También incursionó en el doblaje, prestando su voz para Spider-Man: Into the Spider-Verse.