
La investigación por la presunta seguidilla de asesinatos cometidos por Matías Jurado, señalado como posible asesino serial en Alto Comedero, sumó este miércoles una etapa clave: se realizaron tareas de excavación en dos puntos del sector 8 de Marzo, en cercanías al barrio San Benito, en San Salvador de Jujuy. Las autoridades confían en que los procedimientos permitan obtener evidencia genética que fortalezca la causa.
El fiscal regional Guillermo Beller, que lidera la investigación, confirmó que los nuevos operativos fueron posibles gracias a testimonios aportados por vecinos y testigos que continúan colaborando activamente. “Estamos cerca de donde él se movilizaba y trasladaba cosas en una carretilla”, explicó el fiscal, en referencia al principal acusado, quien negó los cargos en su contra pero permanece detenido con prisión preventiva.
Las excavaciones se enfocaron en detectar posibles restos óseos o rastros biológicos que puedan vincularse con alguna de las cinco personas en situación de calle desaparecidas que la fiscalía asocia a Jurado. Entre las declaraciones clave, figura también la de un sobrino del imputado, quien habría brindado detalles sobre los lugares que su tío frecuentaba y los movimientos que realizaba en horarios nocturnos.
Este nuevo avance se suma a los hallazgos ya efectuados en la vivienda de Jurado en Alto Comedero, donde se encontraron restos humanos y manchas de sangre, actualmente bajo análisis de ADN. Además, la fiscalía amplió la investigación hacia otras desapariciones con características similares.