
En una nueva derrota parlamentaria para el gobierno de Javier Milei, la Cámara de Diputados aprobó por 159 votos a favor y 67 en contra la declaración de emergencia del Hospital Garrahan, uno de los centros pediátricos más importantes del país. Con dos tercios de los votos, el proyecto se encamina ahora al Senado, donde la oposición también espera tener el respaldo necesario para convertirlo en ley y blindarla ante un eventual veto presidencial.
La medida, que busca garantizar el funcionamiento operativo del Garrahan y mejorar las condiciones del personal de salud, se convirtió en el segundo golpe parlamentario en pocas horas para el oficialismo, tras la aprobación del aumento de presupuesto para las Universidades Nacionales.
El oficialismo de La Libertad Avanza votó en contra, al igual que la mayoría del PRO y los radicales de la Liga del Interior, mientras que el proyecto recibió el respaldo de Unión por la Patria, la Coalición Cívica, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, la izquierda, y sectores disidentes del radicalismo.
Durante el debate, el presidente de la Comisión de Salud, Pablo Yedlin, alertó sobre la crítica situación del hospital pediátrico: “350 mil niños fueron atendidos en el Garrahan en 2024. No hay otro lugar donde puedan ser tratados”.
El proyecto establece un aumento de recursos para garantizar la atención pediátrica, una recomposición salarial para el personal de salud y la eximición del impuesto a las ganancias para quienes realicen guardias y tareas críticas. También habilita al Ejecutivo a reasignar partidas presupuestarias y utilizar reservas de contingencia sanitaria.
El diputado y neurocirujano Facundo Manes afirmó que “en el Garrahan se lucha todos los días con humanidad y ciencia” y subrayó que la salud pública es clave para el desarrollo humano y económico del país.
Desde el oficialismo, la diputada libertaria Juliana Santillán acusó a la oposición de usar la ley como una herramienta política:“Esto no es una urgencia sanitaria, es una ingeniería legal para instalar estructuras kirchneristas”.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el impacto fiscal anual estimado sería de 133 mil millones de pesos, lo que alimentó el rechazo del oficialismo, que sostiene que el gasto es “inviable”.
La votación consolida una mayoría opositora activa en temas sensibles y representa un nuevo frente de conflicto para el Gobierno, que ya venía recibiendo fuertes críticas por los recortes en salud, educación y políticas sociales.
El proyecto deberá ahora ser debatido en el Senado, donde la oposición buscará repetir la contundencia obtenida en Diputados y forzar al Ejecutivo a implementar la emergencia en el hospital pediátrico más emblemático del país.
ND